Qué pena lo de Gadafi

LBNL

Será que soy un desalmado pero a mí la pena que me dio el linchamiento de Gadafi es que durara tan poco… Porque el gachí en cuestión llevaba más de cuarenta años puteando al pueblo libio, decretando la muerte de cuántos libios percibió que podían ser una amenaza a su poder omnímodo, privándoles de una educación en condiciones a un nivel que hace palidecer las restricciones educativas franquistas, robando a manos llenas y financiando cuántas alocadas aventuras se le ocurrió en su megalomanía sin límite y, últimamente, varios meses bombardeando a la población civil con ayuda de mercenarios contratados con el dinero del petróleo de todos los libios. Así que lo que lamento es que se fuera casi de rositas, con un tiro en la cabeza después de sólo unos minutos de pavor ante la muchedumbre enardecida e incontrolada, por una vez no sumisa, que le trató como a la bestia inhumana que llevaba dentro y que siempre demostró ser, por mucho que en sus últimos momentos preguntara cortésmente qué iban a hacer con él y apelara a la piedad de sus captores.

El ojo por ojo, la ley del Talión, es sin duda un código primitivo, que afortunadamente hemos superado. Nuestros Estados Nación se dotan de ordenamientos jurídicos, más o menos garantistas, que tratan de impartir Justicia con equidad y, aunque a las asociaciones de víctimas de ETA se les suela olvidar, con el objetivo de la reinserción del criminal, no su castigo. Pero eso es aquí, donde se puede, donde la crueldad de los crímenes también se limita por medio del monopolio del uso de la fuerza –controlada- por parte del Estado.

En Libia llevaban más de cuatro décadas de uso incontrolado de la fuerza. Ojalá los que se han rasgado las vestiduras por el linchamiento de Gadafi hubieran vertido una mínima parte de los ríos de tinta condenatorios en criticar al sátrapa antes de que se pusiera de moda hace ya unos meses. Por supuesto que habría sido más correcto que Gadafi hubiera sido apresado y posteriormente juzgado y, en tal caso, sería mejor que hubiera recaído sobre él la cadena perpetua antes que la pena capital.

La contradicción entre lo más correcto y lo más justo es sólo aparente. Yo soy contrario radicalmente a la pena de muerte. No es eficaz para prevenir asesinatos, se cometen errores en su aplicación y, además, pone al Estado al mismo nivel que al criminal. Ni siquiera estoy de acuerdo con administrársela a un pederasta reincidente confeso que no tiene posibilidad médica de curación y que la demanda. Por principios. Ello impide que entienda perfectamente y pueda en determinados casos disculpar que una víctima se tome la justicia por su mano.

Los libios que mataron salvajemente a Gadafi lo eran, fueron víctimas de sus crímenes todavía más salvajes y continuados en el tiempo y por tanto no sólo no lloro la muerte del cerdo sino que lamento que su San Martín haya tardado tanto en llegar, y por supuesto entiendo perfectamente a quiénes se lo cargaron. Me pregunto cuántos de los que lamentan amargamente la brutalidad de la masa no habrían participado de la misma de haber sufrido las mismas circunstancias. Por lo demás, el linchamiento no es una maldición congénita que marque sin remedio el devenir de Libia, sino más bien una muestra de las dificultades que enfrenta, como el asesinato de Ceaucescu no es la causa de los problemas que tuvo Rumanía para incorporarse a la senda de la democracia sino consecuencia de su lamentable estado previo.

Libia es un país creado de forma bastante artificial por las potencias occidentales que previamente ejercían su dominio. Es una vasta extensión de tierra, fundamentalmente desértica, con una población muy reducida, con grupos tribales alejados unos de otros, todo lo más agrupables en tres zonas cuyas tensiones políticas y sociales hacen palidecer las que tenemos en nuestro Estado autonómico. A todo ello se une el paupérrimo desarrollo cívico por efecto de los años de autoritarismo cavernario de Gadafi, sin que haya nada parecido a instituciones profesionales, medianamente independientes, que puedan empezar a construir un Estado moderno inmediatamente.

Esas son las verdaderas dificultades que van a lastrar el desarrollo político-social de Libia en los próximos años y no el linchamiento de Gadafi, por mucho que en los próximos años plumas brillantes nos vayan a recordar cada vez que la transición libia dé muestras de descarrilamiento, que las dará, que otro gallo hubiera cantado de haber sometido a Gadafi a un juicio justo. ¿Ante qué juez? ¿Con qué ley, bajo el libro verde? ¿Custodiado en qué cárcel y protegida con qué fuerzas de seguridad?

Hasta el más europeo de los intelectuales europeos compartirá que Gadafi se pasó décadas acumulando méritos para tener el fin que tuvo, por mucho que lo condenen. Simplemente añado que, además de merecerlo, no había una opción realista mejor. Y ahora a ver si logran capturar a su hijo Saif, pretendido sucesor, y esta vez conseguimos llevarle al Tribunal Penal Internacional y le sometemos a lo que también merece: largos años de escarnio y prisión por su infausta complicidad con su detestable padre.

12 comentarios en “Qué pena lo de Gadafi

  1. LBNL, ¿usted piensa que su articulo es objetivo? http://vimeo.com/31322866 ¿No se ha convertido usted en un pequeño Gadafi que merece un pequeño linchamiento moral? con perdón, se ha pasado tres pueblos… escribe usted: «Así que lo que lamento es que se fuera casi de rositas, con un tiro en la cabeza». Nunca he estado a favor de Gadafi como tampoco estoy a favor de las falsas verdades y el apoyo a la violencia venga de donde venga. http://www.youtube.com/watch?v=RHevjlxQuhA

  2. Buenos días.

    Yo creía que aquel júbilo que expresaba Barañain por la muerte de Gadafi (y en aquellos momentos, todavía no conocíamos la crudeza del maritiro medieval al que fue sometido) era uno de los momentos más tristes de DC. Después de leer, ya en el encabezamiento, » … Será que soy un desalmado pero a mí la pena que me dio el linchamiento de Gadafi es que durara tan poco … «, creo que me equivoqué.

    Debe ser que soy un sentimental, pero yo el futuro que quería para Gadafi, como lo quiero para el sátrapa de Siria y otros que campan por sus respetos todavía subyugando a sus pueblos, es el que tuvo Milosevic: sentado frente a un tribunal y respondiendo de sus crímenes de lesa humanidad conforme al Derecho Internacional. Porque ese, y no otro, es el matiz diferencial entre gentes como Gadafi y los que nos sentimos demócratas: huir de la venganza, de la irracionalidad.

    Sí, como afirma Don Santiago, cuando alguien defiende algo así, se equipara a la altura moral del sujeto en cuestión. Y pierde totalmente la autoridad moral, si es que alguna vez la tuvo.

    Realmente desagradable, algo que no me esperaba. Respecto de este artículo sólo me queda expresar mi repulsa. Con mucha gente en España y en Euskadi pensando así, no estaríamos ante el final de ETA, estaríamos linchando etarras, ex-etarras y abertzales en la calle rememorando la carnicería de Irene Villa o la del Hipercor de Barcelona.

    Que pasen un buen día, si es que pueden. A mí me lo ha jodido este articulista.

  3. Una vez un psiquiatra me dijo que uno no está loco porque se le ocurran locuras, sólo se vuelve loco cuando se pone a ejecutarlas. Yo seré un pequeño Gadafi pero la diferencia con el grande es que no mato. Ni siquiera participé en la turba y si lo hubiera hecho seguro que no habría pegado tiros ni golpes. La cuestión es que yo soy un europeo próspero y bien educado que además no tiene nada que lamentar por la dictadura de Gadafi. Si no entienden la diferencia… Qué tiene eso que ver con la necesidad de que el Estado y los ciudadanos españoles se comporten como deben y -matiz importante- pueden por nuestro más alto desarrollo cívico-social?

  4. Dice Cebrián hoy en El País: «Los candidatos a gobernarnos deberían explicarle mejor a la gente que de ese grupo de personas reunido mañana y el viernes en Cannes, cuyo poder no está legitimado sino por el ejercicio del poder mismo, depende mucho más la solución al desempleo de los españoles que del cumplimiento de los programas presentados a los electores.» http://www.elpais.com/articulo/opinion/Decir/verdad/elpepiopi/20111102elpepiopi_11/Tes
    Pero no era Zapatero el responsable del paro y la crisis? Ahora va a resultar que había mucha influencia externa…

  5. Por cierto, puedo desmentir y desmiento que Barañaín y yo seámos la misma persona y para demostrarlo fehacientemente exclamo: el tripartito fue un desastre! 🙂

  6. ¡La que esta liando Papandreu!

    Acabo de ver el mensaje en video de Iñaki Gabilondo que empieza cuestionando la ocurrencia de Papandreu para, luego, hacer un cantico a «la llegada de la gente» cuya participacion por lo visto pone nerviosa a la burocracia, como se demuestra con el solo anuncio del referendum, bla, bla,..

    http://blogs.elpais.com/la-voz-de-inaki/

    Postura, esta de Gabilondo, que me parece tan previsible como demagogica. Imaginemos que la cosa fuera al reves; que la actuacion europea para evitar la quiebra griega y su salida del euro, una vea aprobada por los gobiernos -de acuerdo con el de Papandreu-, fuera sometida a referendum en los pases europeos como requisito previo para su aplicacion. O sea que, pese al criterio de los gobiernos y de la Union Europea, los griegos tuvieran que estar pendientes de la aprobacion de todos y cada uno de los electorados de cada pais concernido. O de alguno de ellos (Alemania, pongamos por caso). Y que finalmente hubiera que decir a los griegos: ¡lo sentimos, el electorado aleman ha decidido que no esta por la labor de apoyar vuestro rescate, y no se puede hacer nada! ¡Ahi os quedais! ¿Que diria entonces Gabilondo?

  7. 6
    «Por cierto, puedo desmentir y desmiento que Barañain y yo seámos la misma persona y para demostrarlo fehacientemente exclamo: el tripartito fue un desastre!»

    Ah, traidor, asi reniegas de tu otro yo, despotricando contra aquel gran gobierno. Este desdoblamiento de personalidad sugiere que estas/estoy bajo de dosis. ¡No se puede salir al blog con la medicacion tan desajustada! ¡Menos mal que Salaberria -que por algo es profesional sanitario-, se ha dado cuenta de la impostura!

  8. Yo tengo que decir como mi Jon Salaberria me amarga un poco el día saber que nos alegramos de un licnchamiento, aunque se lo tenga merecido mil veces, pero si renegamos de los dictadores es porque en sus entrañas no habita el don de la justicia ni han tenido reparos en cometer los crímenes de los que se les acusa. Dicho esto el espectáculo en horas infantiles matando a un ser humano ante millones y millones de personas de todas las creencias de todos los países del mundo. Luego ante cualquier desliz en el que haya escenas subidas de tono practicando el amor, no la guerra, todo el mundo se escandaliza y hasta la Iglesia Católica se sube por las paredes. Ahora ante un linchamiento público (ILEGAL) porque para ello están las leyes, para juzgar, condenar y en último extremo la pena de muerte (ILEGAL) para mi modo de pensar nadie tenemos derecho a quitar la vida a nadie. Ante estos hechos tengo que decir que celebro que Libia tenga la paz, la libertad y la democracia pero de ninguna manera veo justo el espectáculo dantesco de un ser humano casi descuartizado y después tirado en un matadero como si de animal se tratase, aunque haya sido su vida un cúmulo de atrocidades. Estos espectáculos ante el mundo solo pueden acarrear violencia y atrocidades. Tiempo al Tiempo

  9. 4.

    «Una vez un psiquiatra me dijo que uno no está loco porque se le ocurran locuras, sólo se vuelve loco cuando se pone a ejecutarlas» Ahora entiendo la diferencia… El loco sólo es peligroso si ejecuta su ocurrencia violenta… a éste es al que hay que parar antes de que actúe. Ya se que usted no es loco pero su pensamiento es peligroso tal y como resalta Jon Salabrerria. Mire, yo no soy psiquiatra, pero su lamento por la muerte de Gadafi bien merecería una disculpa, eso le honraría. Entiendo que en ningún caso participaría en acción violenta, pero sus palabras le dejan en entredicho, no se me ofenda.

    Hay un tipo de locura, de la cual yo soy fan, que aun siendo locura no hace daño y si se ejecuta, al final, todos se benefician. Siempre ha sido así, con toda seguridad usted disfruta de su prospera educación europea gracias a los locos pacíficos que han pululado y pululan en este planeta y deba su desatino de hoy a los cuerdos violentos que defienden el sistema que le sustenta.

    http://www.youtube.com/watch?v=zVu9eawb1QY

    PD: perdoneme

  10. Lo de linchar está mal se mire como se mire pero para que sea ilegal, salvo que se aplique el derecho divino, tiene que haber una ley democráticamente aprobada que lo condene y un tribunal independiente que pueda decidir que se está ante un linchamiento. Nada de eso hay en Libia, me perdonen, pero es asín…

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