Más allá de la consulta

Docrialbert

 Finalmente, se han cumplido los pronósticos. El Tribunal Constitucional ha prohibido la consulta del 9 de noviembre y el gobierno de la Generalitat ha acatado la sentencia. A partir de este momento, ha vuelto a desatarse la locura. Reuniones con contenidos secretos, ofertas de gobierno a ERC, ruptura del bloque soberanista, propuesta de sucedáneo de consulta, aceptación del ‘nuevo’ 9-N por parte de la ANC a cambio de elecciones anticipadas, negativa de CiU a aceptar dichos comicios y, finalmente, apuesta conjunta por el proceso participativo, cuando nos habían contado que el bloque por el derecho a decidir se rompía porque no se aceptaban paripés.

 La desorientación es máxima y la mayoría de la población todavía no sabe exactamente en qué consiste el proceso participativo. El gobierno catalán lo presenta como un sustituto de la consulta desconvocada, hecho que no se sostiene por el mero hecho de que está prohibida. El gobierno español, que saludó con entusiasmo el veto, ahora no sabe si debe recurrir o no la nueva propuesta. Los partidos soberanistas van dando bandazos de un lado a otro, pues en realidad no se posicionan tanto por cuestiones de coherencia, sino por el temor a lo que pensarán los demás y a no ser acusados de traidores a la patria. Y así es difícil mantener posiciones sensatas.

 Ante tales tribulaciones, el debate político de fondo se está convirtiendo en una víctima colateral de la situación. Unos defienden la sacrosanta Constitución del 78. Otros postulan la independencia como panacea y única alternativa. Y muchos de los unos y de los otros se lanzan como fieras contra las llamadas terceras vías, porque ante semejante conflicto los que no están con nosotros están contra nosotros. Por eso es tan difícil ver más allá del 9 de noviembre con una cierta lucidez política, y los que lo intentan pueden acabar clamando en desierto en medio del fragor de la batalla. Sin embargo, es obligado que alguien trate de reflexionar a este respecto.

 Si miramos un poco más lejos en el tiempo, podemos comprobar como el problema político entre el Parlamento de Cataluña y el gobierno de España se agrava unos años atrás. La primera gran movilización ciudadana tuvo lugar el 10 de julio de 2010, en defensa de un Estatut que había sido recortado por el Constitucional. A esta han seguido otras protestas cada vez más masivas, fruto del rechazo desde Madrid a cualquier intento de pacto fiscal o a la misma consulta. Es evidente que han influido factores como el papel de los medios de comunicación o el intento de CiU de desviar la atención de las miserias sociales, pero no se puede minimizar que una buena parte de la ciudadanía está en desacuerdo con la actual inserción de Cataluña en España.

El actual Estado de las Autonomías está en crisis, y no es lo único que está en crisis. La corrupción, la caída del bipartidismo, el cambio de Rey, la pujanza de las fuerzas políticas de izquierdas y el hartazgo de la población son elementos que cada vez más cuestionan el régimen político actual. En este contexto, el mantenimiento del sistema territorial que deriva de la Constitución de 1978 es uno de los anacronismos que tenemos que padecer, y el conflicto político que se vive en Catalunya hay de enmarcarlo dentro de una dinámica bastante más amplia.

El gobierno español trata de aferrarse de manera desesperada a un marco político que está siendo superado por los acontecimientos. Mantener el status quo actual es incompatible con dar satisfacción a las aspiraciones nacionales de Catalunya, y tratar de evitar encarar este problema no sólo no lo resolverá, sino que tenderá a recrudecerlo cada vez más, como se está viendo en los últimos meses. La situación a medio y largo plazo no es sostenible, y la pérdida de la mayoría absoluta del PP ha de abrir el camino al planteamiento de las distintas alternativas que tienen que discutirse con valentía política.

La independencia de Catalunya es una opción legítima y que debe discutirse con mucha seriedad, teniendo en cuenta la distribución actual de competencias entre Catalunya, el Estado y la Unión Europea. Pero hay otras salidas intermedias, que sin llegar a la secesión, pueden contribuir a crear un marco de convivencia mucho más satisfactorio. En este sentido, la apuesta por el federalismo también necesita de mucha más concreción en cuanto a la distribución de atribuciones. En todo caso, la apuesta federal debe ser puesta sobre la mesa y debe discutirse en profundidad durante los próximos años, en aras a superar la crisis actual. Si finalmente el camino final es la independencia debe decidirlo el pueblo de Catalunya, pero desde mi punto de vista esto debería hacerse planteando con rigor las diferentes alternativas que nos permitan avanzar desde la situación vigente.

Todo este debate es el que deberemos afrontar en el futuro, pero no de manera aislada a los otros temas fundamentales que comentaba más arriba. Hablar del derecho a decidir, del federalismo o de la independencia ha de ir acompañado de la discusión entre monarquía y república. Y, sobre todo, de la reflexión más de fondo sobre cómo superar un régimen político y económico que ahora mismo no es compatible ni con los derechos sociales ni con un concepto mínimo de democracia. En Catalunya, los vectores social y nacional no pueden desvincularse, pues cuando hablamos del derecho a decidir no incluimos sólo temas territoriales, sino de soberanía política y económica. 

En conclusión, espero que pronto logremos superar el cortoplacismo y la confusión que estamos sufriendo durante estas semanas, y que podamos hacer frente con un mínimo de sensatez a una situación que no puede resolverse con consignas simplistas o con posiciones de enroque político.

21 comentarios en “Más allá de la consulta

  1. ¿Lucidez política? ¿Sensatez? ¿A la vez que decimos que vivimos en un «régimen político .. no … compatible … con un concepto mínimo de democracia? A mi muy sensato y lúcido no me parece tal exageración.
    A no ser, claro está, de la injusticia palmaria de que los extranjeros que viven en España no tienen derecho a voto y por ende no pueden decidir sobre el futuro político del estado en que viven. Pero algo me dice que no es el caso.
    En fin, que todos somo radicales buenos, porque los radicales malos son por definición los otros.

  2. Siendo lo de Cataluña un problema latente, no llega ni a la mitad de lo que la corrupción en España está haciendo de daño. es de una gravedad importante, creo que lo demás pierde vigencia, eso no quita que tus consideraciones sean de una objetividad pasmosa y te felicito.
    quiero hacer unas observaciones en torno a la corrupción si me lo permitís.
    Cuando en tiempos pasados las casa se “ENCALABAN” por lo menos una vez al año, se sacaban todos los enceres a la calle y se procedía a una limpieza exhaustiva, no se levantaban las alfombras porque no había, pero si se limpiaba a fondo, se encalaba y a veces se cambiaba de color. Al volver a colocar los enseres los que estaban deteriorados se quemaban, en una palabra una limpieza a fondo.
    Ha llegado la hora de “ENCALAR” de limpiar a fondo, no hay lugar a limpiezas a medias, a dar unas “bajeras”, en palabra antigua, a no dejar enseres en la casa que ocupan lugar y no sirven para nada. Ha llegado la hora, han saltado todas las alarmas, no hay formación política, sindical, institucional que no esté salpicada por la corrupción, el pillaje, la malversación de los fondos públicos.
    Esto ya no es que tenga nombres, es que al igual que las depuradoras a su alrededor huele mal. La manzana podrida está pudriendo, contaminando al sistema y por tanto la confianza ciudadana se ha perdido. Llevamos mucho tiempo poniendo en manos de los corruptos los destinos de los españoles. Ya no valen las disculpas, el no lo volveré hacer, ha llegado la hora como ha dicho alguien en el Congreso tu mas no, ha llegado la hora de decir YO más. No queda tiempo, estamos dando la imagen al mundo de un país bananero, irresponsable y corrupto. Los buenos políticos (que los hay) se sienten impotentes y con las manos atadas, la Justicia está en manos de quines no son capaces de ejercerla con honradez, como decía el Presidente de Poder Judicial, la Justicia está hecha para los roba gallinas, las circunstancias nos demuestran la razón que tiene.
    Ya no hay lugar para pacto venideros, sin la depuración adecuada, aquí el único pacto que cabe es “ENCALAR LA CASA” limpiar fondo y quemar los enseres inservibles. Solo entonces se podrán hacer pactos para el futuro, hay que hacerlos para el presente, mientras no se limpie la casa no se pueden meter nuevos enseres.
    Al tiempo que van subiendo los niveles de corrupción, suben los niveles de pobreza, el desamparo infantil, bajan las pensiones, mientras los ricos aumentan en España.
    Las administraciones locales se desgañitan pidiendo recursos que son las que tienen mas cercanía con el ciudadano y apenas pueden cumplir sus objetivos.
    El espectáculo del rescate bancario, las preferentes, los recortes en todos los sectores dan la imagen de un país en los que los poderes están motivados solo para proteger al corrupto enriquecido a costa de y en detrimento del bienestar de los ciudadanos.
    Ha llegado la hora de la verdad, no caben paños calientes, ni propósitos de enmienda, solo cabe que los culpables lo paguen y devuelvan lo robado.

  3. Aquí no va a pasar nada:
    OPción a): Pasado el nuevo9N CiU pactará con el PSC como quiere el senyor Fainé y todos contentos. No se vota hasta el 2016, que ya se notará la recuperación. El efecto Pedro Sánchez compensa las pérdidas de CIU. unos milloncetes más, como decía Fernando antaño y todo arreglado. El Kennedy de Pozuelo gana las eleccions en el 2015 y todo bien. Los de siempre siguen chillando pero ná de ná. Circulen, que aquí no hay nada que ver

    Opción B) El Mundo publica los casos de corrupción que estan por salir de CiU y todo el procés salta por los aires. CDC se hunde, Y Duran Lleida saca su Catalunya al centre, que ganará las elecciones y podrá gobernar con un PSC que remonta (efecto Sanchez). Gran parte del electorado catalán descubrirá que ha sido engañado y dejará de votar a ERC para volver con Iceta.

    Los de Podem daran por saco en cualquier sentido. Los de siempre seguiran protestanto pero ná, Circulen, se acabó la función.
    Ya la reforma federal… pal 2016 y eso…

    Las fuerzas progresistas de la luz: PSC, UDC, Fomento, Cercles equestres y de economía, Planeta, LA Caixa, Banc de Sabadell vuelven a vencer a los facha del repliege nacional: ERC, CUP, Sindicatos, La Monja Trosquista y los subsidiados de Venezuela.

  4. Dice bien el sr Pratxanda: el tema puede quedar obsoleto en horas.

    Lo cierto es que la obsolescencia programada es uno de los rasgos claves de este proceso. Se convocan cosas que se sabe que van a quedar fuera de servicio antes de que llegue su fecha de utilización. A partir de ahí se improvisa, se inventa, se bloquea, se reinventa, se dribla, se mangonea… Entretanto la sociedad se ata a alguno de los discursos puestos en circulación y piensa que sí, que tienen razón, que somos todos mártires de la democracia.

    Los derechos sociales son recordados en el artículo, ¿pero quién está dispuesto salir a la calle a exigirlos? ¿Qué tiene que pasar en Madrid para que manifestaciones masivas exijan el desalojo de la instituciones de la comunidad? Pero nada, oiga, es la misma falta de exigencias de dimisiones que muestra la presuntamente movilizada ciudadanía catalana, que da por bueno ir de la mano de los que le levantan la cartera a la que se da la espalda. Así no hay manera.

  5. Trigo Limpio… hoy le compor el post

    ustedes van areglando lo de la corrupción (la suya y la nuestra) y de mientras vamos votando, y eso…
    La constitución catalana la podemos sacar en fasciculos

  6. «La independencia de Catalunya es una opción legítima y que debe discutirse con mucha seriedad»

    Claro que sí, pero con los cabrones de CiU no se puede. Todos los días te cambian el concepto para que no veas la corupción y los recortes. Que si referedum, que luego consulta no refrendaria, que si proceso participativo,… el caso es liar al personal… Eso Alex Salmond nunca lo haría.
    Ahí los que engañaron a los escoceses eran los políticos de Westminster.
    Rajoy (vía plasma) y Pedro Sanchez (por teléfono en sálvame ) tambien quiere hacer un debate serio sobre la independencia. Pero con el Parlament haciendo cosas raras no se puede

  7. «En todo caso, la apuesta federal debe ser puesta sobre la mesa y debe discutirse en profundidad durante los próximos años»

    ah… vale… voy a por cervezas… y a comprar un sofa nuevo…. 🙂

  8. «Si finalmente el camino final es la independencia debe decidirlo el pueblo de Catalunya, pero desde mi punto de vista esto debería hacerse planteando con rigor las diferentes alternativas que nos permitan avanzar desde la situación vigente.»

    Claro que sí. Y lo que primero nos planteamos es petarnos la ley de referendums, lo segundo no transferir la competencia, tercero cargarnos la consulta no refrendaria (que se salvó del estatut) y lo cuarto el proceso participativo con urnas y eso…
    Y 800 picoletos de regalo.
    http://www.elconfidencialdigital.com/seguridad/Interior-guardias-civiles-Cataluna-retirar_0_2359564052.html

    Todo rigor y amoooooorr

  9. Parece que a Rajoy se le complican las cosas en Madrid. Se pregunta si nadie se equivocado alguna vez. Como dicen en México: ¡Qué padre!,
    :::::::::::::::::

    Y a todo esto, Teresa Romero dice que lo que necesita es a su perro. ¡Qué cosas! (Y conste que eso no es culpa del ébola; debía de ser así ya antes de contagiarse),

  10. Gracias por vuestros comentarios. Tal vez sea uno de esos llaneros solitarios que apuesta por el federalismo, pero es que sinceramente lo veo como la vía hacia la que tiene que avanzar España para evitar el conflicto territorial.
    La mayoría absoluta del PP tiene los días contados. Si en la próxima legislatura se hace una gran coalición PP-PSOE, nos podemos ir olvidando de un federalismo decente, pero estoy convencido de que las patronales española y catalana presionarán para llegar, como mínimo, a un acuerdo de tipo fiscal.
    Sin embargo, si Podemos e IU consiguen superar al PSOE y hasta al PP, el panorama estará más abierto. Esta es la esperanza que tengo para resolver el problema de Catalunya, aunque lo que más me preocupa ahora mismo es superar las miserias sociales que estamos padeciendo.

  11. En manos de rufianes, Polonio. Además de irresponsables. Y de locos de atar.

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