Los mejores treinta años de la Historia de España

Jelloun 

Hoy hace treinta años lo mejor de la sociedad española vivía con ansiedad y esperanza el inicio de la andadura de la España constitucional, una vez concluída la primera campaña electoral tras 40 años de silencio. Este viernes, 15 de junio, se cumplen 30 años de las primeras elecciones democráticas tras la muerte de Franco. Escuchaba ayer por la radio a Nicolás Sartorius –activista antifranquista y cofundador de CCOO-, respondiendo a esas preguntas tópicas de “¿Qué estaba Vd. haciendo ese día ?� o “¿Cómo resumiría el balance de lo acaecido en nuestro país desde aquella fecha?�. A esta última cuestión respondía con la frase que he tomado prestada para encabezar el comentario: “han sido  los mejores treinta años de la historia de España�.

Sartorius ha publicado muy recientemente – junto con Alberto Sabio, que en 1977 tenía sólo nueve años-, el libro “El final de la dictadura. La conquista de la democracia en España, noviembre 1975-junio 1977â€?. Una obra necesaria, sin duda. Porque al volver la vista atrás se puede caer en la tentación de pensar que la “transiciónâ€? ocurrió de un modo blando y suave, casi sin esfuerzo. Y nada más lejos de la verdad. Para una mayoría de los españoles había llegado el ansiado momento de comenzar a vivir democráticamente, de una vez y por todas, pero no eran pocos los que tenían  la idea contraria, los que deseaban prolongar indefinidamente el régimen dictatorial.  

El período que va desde noviembre de 1975 –muerte del Dictador-, hasta junio de 1977,  fue bastante turbulento y pródigo en acontecimientos. Frente a tópicos construidos sobre la Transición,  con sus inexactitudes y tergiversaciones  respecto a la naturaleza del proceso de reforma/ruptura del régimen franquista y el papel de personajes clave en el mismo, recuerda Sartorius que la democracia española se ganó en la calle. No es cierto que la dictadura muriera con Franco. Fue la movilización popular en la calle la que acabó con ella, unos meses más tarde, frustrando la posibilidad de que persistiera un franquismo sin Franco (que era el objetivo del Gobierno Arias-Fraga). “El dictador murió en la cama, pero la dictadura murió en la calle�,  es la frase que podría resumir esta tesis. Los verdaderos actores sociales de la Transición, no fueron los dirigentes políticos. La visión “canónica� de la Transición tiende a darles  mayor relevancia de la que tuvieron realmente. Si Suárez, Carrillo, y los demás dirigentes fueron “copilotos�, y el Rey el “piloto� de la Transición, lo cierto es que el motor de la misma fue la “erosión social ejercida desde abajo�. Fueron las movilizaciones de trabajadores –con un rosario impresionante de huelgas y demostraciones de fuerza-,  de estudiantes, vecinales, de profesionales, etc las que hicieron posible el cambio. Es algo que, interesadamente, se quiere hacer olvidar cuando se dice que la democracia “llegó� después del franquismo, como si de algo natural se tratara. En realidad, fueron unos años más duros de lo que se ha difundido, con mucha violencia  y con la presencia de un notable riesgo de involucionismo civil y militar. Fueron años de “incertidumbre y de temor� y también por ello  de  autocontención, de voluntad de negociación y de cierto grado de vigilancia mutua entre diferentes sectores sociales, lo que facilitó la Transición pacífica. Preservar y difundir la memoria de ese combate democrático es imprescindible. Y una forma de “elevar la autoestima colectiva� de los españoles, tal y como reivindica Sartorius.

Al rememorar esa víspera electoral crucial del 15-J de 1977 no me interesa, particularmente a mí al menos, la discusión sobre los “hitos� y “fechas� de la transición, esto es, si esas elecciones la abrieron, la culminaron o sólo constituyeron un episodio más en un proceso de final entonces incierto. Son controversias para historiadores por más que estén a menudo cargadas de intencionalidad política. Lo que me interesa destacar ahora es, simplemente, que esas primeras elecciones democráticas abrieron este período de treinta años que son los mejores de la historia de España. O, para ser mas precisos, los mejores treinta años en la historia de los españoles.  

No hablo, claro está, de ninguna España mítica, de ninguna “unidad de destino en lo universal�,  ni de ninguna esencia patriótica más o menos misteriosa. Hablo de los españoles de carne y hueso que han poblado  a lo largo de la historia este pedazo de Europa. Nunca como en este periodo las generaciones que han  compartido este tiempo y este espacio, han disfrutado de unas mejores condiciones de vida. Nunca en este país, como a lo largo de este período, sus ciudadanos fueron más libres, ni vivieron mejor, ni fueron como ahora tan dueños –colectivamente-  de su destino. Nunca fueron tan iguales entre sí (o si se prefiere, nunca fue menor la desigualdad). Nunca fueron tan sabios. Nunca estuvieron tan unidos. 

Parecerá obvia esa apreciación pero no creo que sea ocioso o inútil pararse a pensar en ello, aunque sea muy de vez en cuando. Las efemérides sirven al menos  para eso. Y es que a menudo la agitación con que se vive el presente hace que se pierda esa perspectiva; y ello  pese a disponer ahora de conocimientos y referencias  sobre cualquier otro período anterior, al alcance de todos,  como nunca antes lo hubo. Y así pueden calar en algún sector social, si se aplica la suficiente presión propagandística, las milongas de “decadencia�, de un país en “riesgo�, de que “España se rompe�, o de que se ciernen sobre nosotros y nuestro futuro terribles amenazas. La Patria en peligro. Hay quien vislumbra incluso una vida sin libertad, quien no ve a su alrededor sino un “inmenso lodazal de indignidad� sin cuento (parecerá increíble para algunos pero hay gente –incluso con estudios-, que se expresa así diariamente, de esa manera tan demente), un país  a punto de rendirse ante la maldad, corroído por gobernantes que actúan como “traidores compulsivos�. 

No me refiero sólo a los lunáticos COPE-adictos. Hace un par de días, Aznar, Rajoy y otros próceres de la derecha española,  abogaban en un acto público  por “la recuperación de los valores que nos han hecho grandes� porque “España es una gran nación, con más de 500 años de historia� a punto de irse al garete pues el actual Gobierno ha creado una “España pobre, sin valores, irreconocible�, que estaría sufriendo “una ofensiva nacionalista sin precedentes�, bla, bla, bla.  Porque, como denunció sagazmente otro de los presentes el objetivo de los actuales gobernantes de España es nada menos que  perseguir “con creciente ensañamiento nuestro idioma común� y la desaparición de “los valores como la unidad de España� y sus “tradiciones�.

Es una vez más la falta de cultura democrática en la derecha española lo que aflora en ese tipo de exabruptos. Una derecha que –en su núcleo dominante-,  no ha sabido romper con la dictadura y que bajo la dirección (aún) de Aznar  sigue empeñada en reivindicar “sin complejos� lo peor de su identidad.

Hace treinta años los demócratas vivían con ansiedad e ilusión las vísperas electorales. Hace treinta años, Aznar y Rajoy se preparaban para capear el temporal.  

39 comentarios en “Los mejores treinta años de la Historia de España

  1. Hola a todos,
    felicidades por tu artículo, Jelloun, y por dos razones: no trata sobre el monotemático monotema, y por el enfoque, por recordar lo díficiles que fueron estos años, la actitud de la gente en general (muchos historiadores, sobre todo extranjeros, destacan que la actitud general de los españoles contribuyó mucho a abrir paso a la democracia), y sobre, todo, por poner coto a tanto catastrofismo interesado como hay ahora.
    Como creo que dije hace poco, nací en el año de estas elecciones democráticas (no saquen conclusiones, porfa), así que lo que sé, lo sé por historias de familia, libros y artículos varios y por la serie de la Prego. Todavía me acuerdo que esa serie la echaron un verano, los domingos por la noche, como para que no se enterara nadie, y me pareció interesante. Ahora no recuerdo mucho, pero digamos que me enteré de bastantes cosas. Por cierto, la serie termina justo con las elecciones de 1977, más por falta de pelas para financiar capítulos, que por criterios historiográficos (A Verlitas no es el único con derecho a usar palabros!).

    Estos 30 años también tienen el mérito de la cantidad: 30 años de democracia. No lo apreciamos, pero en España no existen precedentes. También es cierto que la democracia como la conocemos hoy es un invento muy nuevecito, que empezó a instaurarse a mediados del siglo XIX en países con Gran Bretaña. España, como tantos otros países, tuvo muchas dificultades para lograr ese sueño de libertad. Pienso, por lo demás, que el peor momento de los últimos 150 años de la historia de España fue la Guerra Civil. Al lado de esto, y si exceptuamos el terrorismo, lo demás son retos corrientes y molientes.

  2. Un dato profesoral para completar la estupenda reflexión de Jelloun: dado su nivel de desarrollo económico, España, en el año 1975, tenía una probabilidad de ser democracia cercana al 80%. El factor que más influye en que un país sea dictadura o democracia es la renta per capita. Lo asombroso es que con el nivel de desarrollo económico de España en 1975 la derecha siguiera siendo tan atrasada que intentara continuar el régimen sin abrir paso a la democracia. La derecha en España es y ha sido extremadamente reaccionaria, por los privilegios que ha tenido y por la gran desigualdad que hay en nuestro país. De ahí sus recelos hacia la democracia. Si finalmente llegó la democracia fue por las presiones que venían desde la calle.

    Y otra cosa: cada vez se hace más sangrante que las víctimas de la transición no hayan tenido reconocimiento institucional ni reparación moral alguna. La ultraderecha asesinó a cerca 70 personas entre 1975 y 1982. En ese mismo periodo, el GRAPO produjo otras 64 víctimas. Y el Estado mató a unos 140 ciudadanos (excluyendo delincuentes comunes) en manifestaciones, huelgas, controles de carretera, comisarías, etcétera.

    En total, hubo unos 650 muertes entre 1975 y 1982, de las cuales 360 corresponden a ETA y 290 al resto de organizaciones terroristas y al Estado. ¿Por qué sólo nos acordamos de las primeras 360 y mantenemos el olvido sobre las 290 restantes?

    ¿Sabían que la transición española ha sido la más violenta de todas en el mundo desarrollado? Mucho más que en Grecia, Portugal, los países del Este…

  3. Volviendo a si los pasos de los últimos días son positivos o una bajada de pantalones del PSOE y tambíen a si la ciudadanía ha entendido lo esencial del proceso de paz pese a la falta de transparencia (y por qué no, también a si los que pensamos que el Gobierno está maniobrando correctamente tras la ruptura de la tregua somos pocos o no) acabo de escuchar el último pulsómetro de la SER:
    El 68% aprueba que el Gobierno iniciara el proceso.
    El 67% cree que el Gobierno debería volver a intentarlo si se dieran las condiciones apropiadas (entre votantes del PP el 40% piensa ésto).
    Más del 80% cree que el reingreso de Juana Chaos en prisión es correcto (poco más del 50% en la CAPV) y más del 70% piensa lo mismo del ingreso en prisión de Otegui (poco más del 40% en la CAPV).
    Gobernar para las encuestas suele ser pan para hoy y hambre para mañana. Pero hacer lo que uno considera correcto y que de paso eso sea precisamente lo que demanda la ciudadanía, está muy bien.

  4. MCEC, el Pulsómetro auguraba una cómoda victoria del PSOE en las municipales…

  5. Gracias por el artículo, Jelloun. El título me parece de lo más apropiado. Imaginaros si los españoles hemos sido generosos, que permitimos que nos volviera a gobernar un señor con bigote durante 8 años.

    El único punto oscuro que veo en los últimos 30 años es la falta de reconocimiento -del tipo que sea- a todas aquellas personas que lucharon por la vuelta de la libertad a España. Pero claro, la derecha en este país es tan cavernícola, que es mentar la ‘bicha’ y salen con el guerracivilismo. Cuando denostan a los perdedores de la Guerra Civil será porque ellos se consideran vencedores, ¿no?

    Finalmente, creo que se te ha olvidado incluir el único vestigio que nos queda del franquismo -y no es Fraga-: ETA. Pues sí, creo que lo único franquista en nuestra sociedad es ETA. Nacieron cuando la dictadura y no han sabido hacer la transición a la democracia. Al margen que se basan en ideales comunes como la construcción de una gran nación, el empleo de la violencia y el terror para hacer política….

  6. Viendo los datos del pulsómetro y recordando lo que señala don Cicuta (4), como hubiese elecciones ya palmamos….

  7. Ahora que se habla tanto de la crispación, y con toda razón, convendría recordar la cruel campaña de la así llamada derecha española, y la derecha extrema española (valga la redundancia), contra Adolfo Suárez. Habría que recordar que para esta derecha que nos ha tocado sufrir Suárez era un traidor a “su� causa (¿les suna el término?), aunque ahora pretendan usurpar su figura, mintiendo y jugando con la Historia, como siempre, y contando unas batallitas que nunca existieron. Oír a Aznar hablar de la transición como un “logro� de todos los españoles, el otro día en TV, es una provocación cruel, además de hortera.

    El denominador común de toda la crispación que se ha vivido en este país en los últimos 30 años tiene a la derecha como actor principal y a quien está en el poder como víctima. Lo fueron Suárez y Felipe, y lo es Zapatero ahora.
    La anormalidad viene determinada, básicamente, por la incapacidad de nuestra derecha para entender la democracia cuando les toca estar en la oposición: lo viven como una patología.

    Otra cuestión de estos 30 años es que la izquierda, junto a otros sectores del arco político, ha legislado para aumentar el marco de derechos y libertades: divorcio, aborto, etc. La derecha siempre se ha opuesta en un primer momento para terminar, en algunos casos, utilizando sus beneficios legales de forma compulsiva: véase �lvarez Casco. Estoy seguro que de esta legislatura el señor Rajoy podrá sacar grandes beneficios en el futuro.

    Cada día estoy más convencido que en España existe democracia a pesar de esta derecha que nos ha tocado sufrir. Desde que Fraga propusiera, en un primer momento, hacer una simple reforma legal del régimen franquista para autorizar «un poquito más» de lo que había, aunque luego cambió, pasando por el intento de dinamitar la transición (leer artículos de Aznar en la Nueva Rioja), hasta llegar a algunas de las propuestas actuales donde se reclama ganar con leyes y en los tribunales lo que las urnas no otorgan: vencer al nacionalismo, toda la derecha española es una absoluta anormalidad en el panorama europeo: entonces y ahora.

    (¿Podríamos decir, freudianamente, que si la ETA es el último vestigio del franquismo en la democracia es por ello que la derecha se empeña en perpetuarla en su discurso político?)

  8. Totalmente de acuerdo con todo lo que dice Landa.

    Es patético comprobar la hipocresía de los que ahora ponen a Suárez en un pedestal. Y no digamos la de los que «añoran» a Felipe frente a Zapatero. O la de los que ensalzan la Constitución como valor supremo. Los que tenemos alguna edad y alguna memoria, recordamos cómo fue todo.

    Odiaron y trataron de hundir y hundieron a Suárez, cuya labor en la Transición nunca se ensalzará bastante (no es por presumir, pero yo le defendí a capa y espada entonces frente a amigos y enemigos). Oidaron y trataron de hundir a Felipe González. Igual que están haciendo ahora con Zapatero: odiarle y tratar de hundirle.

    La derecha de este país, llámese Alianza Popular o llámese Partido Popular es profundamente reaccionaria. Y profundamente hipócrita. Se opusieron como fieras al aborto mientras mandaban a sus hijas a abortar a Londres. Se opusieron como fieras al divorcio, mientras se divorcian como todo hijo de vecino. Se opusieron como fieras a los matrimonios homosexuales mientras se alegran por dentro de que muchos de ellos podrán por fin salir del armario y casarse cuando pase la tormenta.

    Y contestando a la última pregunta de Landa, sí, yo creo que podríamos decirlo.

    Por último, una perla de la tercera de ABC, del artículo que nos colgó Isidoro: «No es ningún secreto que muchas personas han acabado preguntándose si, en vez de confiar en la justicia, sus derechos no estarían mejor protegidos por una banda de pistoleros».

    Esto lo escribe Carlos Martínez Gorriarán, ese señor que es representante de Basta Ya y que luego se lamenta de que este movimiento cívico no tenga los apoyos que tenía en el pasado. ¿Por qué será?

  9. La historia de estos 30 años es también la de aquellos que se quedaron en el camino. No me refiero sólo a aquellos que fallecieron, que también, sino a quienes fueron referencia en algún momento por algún motivo y se terminaron desplomando con todo el equipo.
    Uno de ellos se llama Martín Prieto. Antiguo subdirector de El País, Prieto escribió en este periódico páginas memorables, como la crónica del juicio de Campamento sobre el 23F o las crónicas de la campaña electoral de Felipe en 1982, además de estupendos artículos.
    Por diferencias con Cebrián, terminó saliendo del diario de PRISA para ir a recalar, ¡cómo no!, al Diario16 de Pedro José. Allí sigue, aunque ahora desde el clon (in)mundo, escribiendo, de vez en cuando, unos mínimos articulitos que yo leo siempre cuando espero turno en la peluquería. Por medio quedó una rocambolesca historia, presentada como un secuestro por J. Pedro, en plena campaña contra Felipe, y que se resolvió con la simple verdad: el tal Prieto estaba de putas, literalmente.
    Viene todo este tema a cuento por la frase que escribió el ya “tal Prieto� en su artículo del 7 de junio en El (in)Mundo:

    “La tregua que nunca lo fue ha fortalecido a los bandidos, que se han reestructurado, han reorganizado comandos, han montado una fábrica de explosivos y hecho acopio de armas y vehículos. El responsable no es el PP, ni siquiera ETA, el responsable es Zapatero. Si hubiera negociado algo no se acordaría del PP ni para informarle�.

    También la historia de estos treinta años es la de aquellos que escriben diariamente en prensa con una única motivación: el odio. Un inmenso odio.

    ( Hasta la semana que viene )

  10. Gracias, Jelloun.

    Yo creo que, sin caer en adanismos, la frase de Sartorius con que titulas se justifica plenamente. Llevando el agua a mi molino, se impone la derivada de que el actual es EL MEJOR GOBIERNO DE LA HISTORIA DE ESPAÑA.

    (Claro que, vista nuestra trágica historia, eso no es decir mucho. En plan positivo, ilusiona pensar todo aquello de lo que será capaz el país cuando tengamos un gobierno bueno de verdad).
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    Ayer, sesión de zapping nocturno. Teleespe. Un sujeto con pinta de vendedor de El Corte Inglés entrevista a otro barbado. El rótulo: Luis del Pino. «Hum -me digo-, me suena que este nombre se ha citado en mi blog». Colijo que hablan del 11-M. Dice Del Pino: «Me gustaría que hubiera sido ETA, pero por desgracia creo que no lo fue. Y digo por desgracia, porque entonces los culpables proceden de las cloacas del aparato del Estado. Quienes con seguridad no cometieron el atentado fueron los islamistas». El vendedor calla y otorga. En una televisión pública. Con un par. Cambio de canal, a ver si encuentro a alguna mamachicho.
    _____

    Abrazos para todos.

  11. Y parece que fue ayer.
    Treinta años de avances economicos y sociales manchados por la intransigencia de unos asesinos.
    Treinta años que han servido para mostrar la verdadera faz de la Derecha española.
    Trienta años intentando que la convivencia fuera posible en esta piel de toro.
    Treinta años y siempre tropezando con la misma piedra.
    Treinta años Treinta y no me acuerdo de lo que hice ese dia.

  12. Impresionante lo que cuentas de la teleespe, Arouet. Ante casos así, a mí siempre me queda la duda de si se creerán semejantes barbaridades, o si se las inventan y creen que es el público el que es subnormal y se las cree.

    Por cierto Arouet, noto que hace tiempo que has dejado de reclamarle la pasta a Zaplana. ¿No será que te la he devuelto y has decidido no decir nada para no tener que compartirla con los restantes blogueros? Aunque solo sea los chicles…

  13. Buenos días:

    Hace treinta años yo tenía veinte años. Y eso condiciona mucho las cosas.
    Estando a grandes rasos de acuerdo con todos los que han escrito en este blog, especialmente con Landa, no sé por qué, quiero señalar que en estos treinta años se pueden hacer, a su vez, subdivisiones. A mi juicio hubo un gran grado de libertad con Suarez, hasta el golpe de estado de Tejero, seguramente porque nadie se aclaraba de nada y por si acaso se dejaba hacer. Así, hubo los muertos que hubo. Pero creo que fue un momento en que pensabamos que la revolución (lo digo con el rubor del perdedor en todas las grandes batallas) era posible. No he conocido otra época mejor, quizá porque era punky y andaba metido en todas las movidas, incluida la madrileña. Luego vino el gobierno de Felipe Gonzalez, con sus luces y sus sombras (el GAL). Y sus rebajas. Luego, Aznar. Y ahora, Zapatero.
    No sé. Me gusta Zapatero porque ha intentado poner el reloj de la historia en su hora.

  14. Hoy he visto a mi querido Labordeta en la Tele Nacional (para los despistados TVE 1 «la Primera»).
    Y en un momento de la entevista ,hablado de la reunion con Zapatero ,Labordeta elogia la «paciencia» del santo Job..perdon..jeje…Zapatero ante los continuos ataques que ha recibido de la bancada populista.
    «Yo me hubiera abalanzado sin remedio hacia ellos…»-nos dice Labordeta.
    Y ¡Flash! como siempre me he teletransportado a un emiciclo donde el presidente del gobierno era Fernando Fernan-Gomez:¡¡A la mierda!!,¡¡vayase usted a la MierdaAAA!!.
    Creo que Zapatero se tendria que haber asesorado por intelectuales de la talla de Fernan-Gomez…los españoles se lo habriamos agradecido y Labordeta aplaudido,aun esta a tiempo…JAJAJA…que nervios.

    Un cambio de talante nunca viene mal…jeje.

  15. Y a mí me gusta mucho eso de que Zapatero ha intentado poner el reloj de la historia en su hora. Me parece una buena descripción de lo que ha intentado y sigue intentando. Y es una labor difícil dado el retraso que llevábamos.

  16. No, PTQNQ, no he renunciado a la pasta. De hecho, ayer conjeturaba que Acebes (a quien tienen un tanto amordazado últimamente para que no les estropee el viaje al centro recién estrenado) está, en realidad, ayudando a Zaplana a juntar los reales que nos debe. No sé si mi olfato de infalible pronosticador me estará jugando otra mala pasada…

    Abrazos.

  17. Yo, con tal de que no aciertes en lo de la explosión nuclear que nos pronosticaste, ya me conformo.

  18. 11 arouet y 13 Por mi que no quede .
    Pero no os habiais dado cuenta que la derecha española ha interiorizado las palabras de Jordi Pujol…las del calcetin…ya sabeis ..les dieron la vuelta.
    La derecha es eso un calcetin en completo movimiento hacia si mismo,jamas diran que sus mentiras no tienen explicacion..les dan la vuelta y les da igual un roto que un descosio…siempre tendran preparada la aguja para hilar fino…fino..fino…
    Pues esperar a cuando la Sentencia sea firme…lo que tendremos que escuchar batira el record guiness de «estupidez supina».
    Y luego dicen que los Idiotas somos nosotros.
    Piden rectificar y no saben declinarlo.

  19. Ay, arouet, la de transcripciones de entrevistas e intervenciones radiofónicas que tengo yo con ese mamarracho de Luis del Pino diciendo eso de las «cloacas del Estado». Y Pedrojota por la misma línea, con Losantos diciendo amén…
    Algún día tendré que afilar la pluma y darles a estos cloaqueros.

    Por lo demás, me ha parecido muy interesante el artículo de hoy para quien, como yo, sabe muy poco de aqueños años.
    El apunte de Don Cicuta me ha resultado impactante. Si es verdad que la transición fue más violenta que esas otras que menciona, quizá deberíamos bajarnos esos humos de «transición modélica» que siempre salen a relucir a las primeras de cambio.

  20. Lo del artículo del pirrónico en ABC hoy es de traca. Entre tontada y tontada (destaca la de cargarle el muerto a Pumpido si el Tribunal de Estrasburgo se carga la ley de partidos), viene a decir que nuestra democracia es una mierda porque permite que se elija a alguien que luego gobierne de forma diferente a la que Gorriarán querría para luchar contra el terrorismo. Y por ello mejor legislar férreamente para que no pueda llegar cualquiera y hacer lo que pone en su programa electoral, por ejemplo. Pero ya puestos, por qué no suspender las elecciones y dejar que Gorriarán y demás ínclitos decidan quién es el más capacitado para gobernar contra el terrorismo? Y por qué no, también en otras materias.

  21. Una pregunta. Simple curiosidad:

    ¿Alguien ha leído u oído comentarios o interpretaciones de la famosa frase pronunciada por ese líder de la gente normal, Mariano Rajoy, en su comparecencia después de ofrecer su apoyo (el apoyo del que se cachondeaba al día siguiente con Jiménez Losantos) al Presidente del Gobierno en la lucha frente a eta? Les recuerdo la frase: «Eta es una gran nación».

    Es que yo no he oído ni un solo comentario. Ya sé, ya sé que fue un lapsus, pero es muy sorprendente este silencio porque en los últimos tiempos, los tertulianos, los políticos y los intelectuales (me encantó esa retahila de Edurne Uriarte) son muy aficionados a la sicología y a hacer interpretaciones profundas de los lapsus cometidos por cierta persona (ustedes me entienden).

    Por favor, que alguien interprete qué pasa por el subconsiciente del gran líder Rajoy para que confunda a España (la gran nación, obviamente) con eta. Algo muy raro debe pasar por esas profundidades. Anímese, Lois, y aclarénoslo. Lo digo poruqe usted es de los que daba mucha importancia a los lapsus.

  22. Dejad ya lo del lapsus, la doble vara de medir es clarísima. Creo que lo más eficaz es hacer una nota mental y sacarlo en defensa propia, cada vez que digan que Zapatero gobierna «como sea». Eso se lo grabaron por accidente cuando ordenaba a sus negociadores que sacaran una declaración adelante. Y se ha quedado en que a Zapatero le da igual el precio… En fin.
    Muy bueno el artículo de hoy. Alguien escribió otro titulado «Cómo en España no se vive en ningún lado, o algo así». Pues lo mismo, ya basta con eso de que como nuestra transición ninguna. Más violenta aclara Don Cicuta, forzada por las demandas sociales antes que producto de la gracia modernizadora del antiguo régimen, aclara Jelloun, y bastante imperfecta, añado yo. Hubo un compromiso global, a lo peor inevitable, pero muy imperfecto porque me repatea tener que soltar etarras asesinos lo mismo que no poder demandar a torturadores del régimen. Las tabulas rasas suelen ser pan para hoy y hambre para mañana. Aquí un poco también. Por último, añadiría lo que para mí es el pecado más grande de toda nuestra transición: que tuviera que esperar a la muerte del dictador. En Portugal lo echaron, Viva Portugal!

  23. Buenas tardes a todos.

    9 Por mi que no quede

    Por último, una perla de la tercera de ABC, del artículo que nos colgó Isidoro: “No es ningún secreto que muchas personas han acabado preguntándose si, en vez de confiar en la justicia, sus derechos no estarían mejor protegidos por una banda de pistoleros�.

    De entre todas las majaderías e infundios con que nos obsequia hoy CMG en su artículo del ABC, la «mejor» perla es esa, sin duda. Menos mal que lo que sugiere es producto de su imaginación. Si es que no hay cómo dejarles que se explayen…que den rienda suelta a sus ideas y obsesiones más profundas. Acaban mostrandose tal y como son realmente.

  24. 12 AMISTAD CIVICA
    14 lope agirre

    Hace treinta años, yo tenía 21 y tampoco me acuerdo de lo que hice ese día. Pero sí de lo que hice al día siguiente: fue mi primera jornada como interventor en una mesa electoral. Del PCE por mas señas.

    Y también me acuerdo de lo que había hecho antes. Incluso de las primeras manifestaciones contra ETA tan pequeñas (apenas unas decenas de rojos) entonces como incomprendidas. Tengo muy viva en la memoria la imagen de panfletos elaborados casi a mano, escondidos por lo que tenían de propaganda ilegal, con los que criticabamos al régimen y al terrorismo etarra, alertando de que ETA seguramente no cesaría en su actividad con la conquista de la democracia. Qué pereza pensar en ello.

    Y de las discusiones postelectorales -post debacle-, con quienes dentro de la organización se quejaban de que se hubiera mantenido actitud tan combativa e impopular (entonces). ¿Por qué empeñarnos en eso si ya sabiamos que no iba a ser comprendido?

    Y ahora que lo pienso, aquella forma de razonar no era tan diferente -pese a las tres decádas transcurridas-, de la que ahora se escucha a veces cuando se reprocha a un gobernante que se haya metido en «jardines» difíciles («haciendoles perder votos», ¡fijate¡) pudiendo haber estado tan ricamente dedicandose a cosas mas ligeras -y no a lo territorial y al proceso con ETA-, ahora que el antiterrorismo es tan masivo. (¡¡Diantres, otra vez descolocado, el caso es no acertar nunca !!).

    Bueno, el abuelo cebolleta se va a echar una ligera siesta que está necesitado.

  25. A cualquier cosa le llamais abuelo cebolleta, Jelloun. Yo, que tenía algunos años más de los que citais, sí que me acuerdo con todo detalle de todo lo que hice aquel día. Y, sobre todo, me acuerdo de la profunda emoción con la que voté por primera vez en mi vida y tan tarde. Emoción que no me ha abandonado nunca cada vez que he vuelto a votar. Será por lo que costó conseguirlo.

    Por eso me asombra tanto la ligereza de quienes actúan como si la democracia aquí fuera cosa de siglos y no fuera algo todavía muy frágil con lo que no se debe jugar.

    Por ejemplo, la persona que escribe en ABC la perla ya citada y que reproduzco porque no quiero olvidar que alguien la ha escrito: «No es ningún secreto que muchas personas han acabado preguntándose si, en vez de confiar en la justicia, sus derechos no estarían mejor protegidos por una banda de pistolerosâ€?. La persona que es capaz de pensar y escribir una barbaridad semejante ¿se considera demócrata?, ¿valora en algo la democracia? ¿se acuerda de lo que costó traerla a España o es que no se enteró nunca?, ¿en qué categoría de las mencionadas ayer por Edurne Uriarte se encuadra esta persona, entre los políticos (futuros) o entre los intelectuales?, cualquiera de las dos posibilidades asusta. ¿Cómo esta persona se puede quejar y no entender por qué los demócratas que un día apoyaron masivamente a Basta Ya no quieran hoy ni oír hablar de una organización que cuenta entre sus representantes a alguien capaz de pensar y decir un disparate semejante? Hace falta tener pocas entendederas.

  26. A Amistad Cívica:

    Privilegios de la edad, amigo. No somos el abuelo Cebolleta, sino Funes el Memorioso. Yo, al menos me acuerdo mucho de los muertos que hemos ido enterrando; y de los «vivos» que han intentado enterrarnos en vida.
    Pero sobrevivimos y, de vez en cuando, sesteamos; quizá para no recordar demasiado.

  27. Frente a la visión bastante complaciente de Sartorius (la transición a la democracia como una dura conquista popular, que tuvo que erosionar las resistencias ofrecidas por la dictadura: es el cuento de hadas que repiten los actores de aquella pantomima), lo cierto es que más se parece a una adaptación de las estructuras franquistas a la nueva situación y a una capitulación de las fuerzas democráticas y populares, que a una (re)construcción que permitiría enlazar las nuevas condiciones político-sociales con el pasado republicano tras el tenebroso paréntesis dictatorial.
    Es evidente que los agentes políticos que desde la izquierda podían actuar como motores del cambio (PSOE y PCE) se convirtieron en elementos de freno de todos aquellos sectores que buscaban la ruptura, apelando una y otra vez al consabido realismo, y desde las posiciones reaccionarias se empleó el miedo como arma fundamental en la disgregación de todas aquellas aspiraciones: el fantasma del golpe de estado sobrevuela aquellos años como una de las claves que recondujeron el proceso al cauce deseado por las élites políticas y económicas.
    Para percibir hasta qué punto está claro quién se llevó el gato al agua (y más allá de la dialéctica entre reformismo y revolución), basta percatarse de los déficits democráticos que arrastramos, desde una articulación territorial que no ha sabido desprenderse de los fantasmas del centralismo franquista (aunque a algunos pueda incluso parecerles excesivo, el invento de las autonomías no es más que un apaño para evitar el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado español) y que es incapaz todavía de lidiar con las legítimas aspiraciones de vascos y catalanes (¿Por qué no reconocer el derecho de los pueblos a autodeterminarse? ¿No es eso claramente un resabio de autoritarismo centralista?), hasta el carácter antidemocrático de la Ley de Partidos o las telarañas de sectores significados de un Poder Judicial convertido en muchas ocasiones en agente declarado del más puro y duro reaccionarismo.

  28. Yo me apunto, Simpapeles, a un terreno intermedio entre la visión «complaciente» de Sartorius y la refutación absoluta de la transición como chanchullo continuista que se deduce de tu escrito.

    En mi opinión, las cosas se hicieron razonablemente bien. Se caminó por el filo de una navaja. A toro pasado, es fácil pensar que tal vez se hubiera podido apretar más, y te concedo que, por ejemplo, en lo que toca al Poder Judicial no se hizo una imprescindible limpieza. (Dicho esto, la mayor parte de los jueces ejercientes hoy son «producto de la democracia», y la asociación preponderante sigue siendo la reaccionaria APM).

    Pero creo que exageras criticando el posibilismo y el pactismo de PSOE y PCE. Lo cierto es que las decisiones de unos y otros permitieron que los socialistas gobernasen con mayoría absoluta ya en 1982. Empezaron a modernizar el país y la transformación ha sido espectacular. Los «mejores treinta años de la historia de España» se fundamentan en lo que se hizo en el período inicial.

    En cuanto al «derecho de los pueblos a autodeterminarse», qué quieres que te diga. Creo que en este blog ya hablamos de este «conceto» y de cómo la formulación que valió para la descolonización del Ã?frica negra no resulta, a mi juicio, aplicable a España. ¿Qué pueblo debe autodeterminarse? Por no ir al País Vasco, ¿es el catalán un «pueblo autodeterminable»? Para los nacionalistas, Cataluña se extiende a Valencia, Baleares, la «Franja de Ponent», Catalunya Nord y l’Alguer. Pero resulta que estos componentes de la «nació» no quieren autodeterminarse con los del Principat. ¿Autodeterminación por fascículos? ¿Es el derecho de autodeterminación una categoría política operativa útil para resolver problemas? Categóricamente, no. Así que, de acuerdo contigo en que el «café para todos» fue un intento de diluir los hechos nacionales más relevantes, no creo que, al final, un modelo de cuasi federalismo asimétrico como el que vamos penosamente construyendo sea tan malo.

    Abrazo.

  29. Más que nada, arouet, lo que creo es que se podía haber intentado bastante más, pero que no se hizo porque no hubo ninguna voluntad para hacerlo. En el PSOE la corriente que ganó fue la liberal-atlantista de González y cia, y estos chicos tenían muy claro desde el principio lo que querían, muy alejado de la vocación de ruptura que en un primer momento podría haber cuajado si hubiese habido una decisión clara en ese sentido.
    Y cuando hablaba de derecho de autodeterminación, la verdad es que no estaba pensando tanto en procesos descolonizadores, que coincido en que no son aplicables al caso, cuanto en el hecho de que en Canadá los señores de Quebec puedan plantear un referéndum de independencia o que en Escocia el partido de James Bond piense en algo semejante, sin que nadie haga sonar las trompetas del Apocalipsis o de la guerra civil. ¿Por qué no es eso posible en el País Vasco o Cataluña?
    En cuanto a qué pueblos son autodeterminables, más allá de argumentos historicistas, creo que son aquellos en donde existe una amplia porción de la ciudadanía que se quiere autodeterminar. Y si la cosa parece muy sencilla, es que honestamente pienso que lo es.
    Otro abrazo.

  30. Gracias, Simpapeles.

    Que la autodeterminación parezca «cosa sencilla» es algo con lo que no estoy en absoluto de acuerdo. Es endiabladametne complicada. Por eso no es útil. No resuelve problemas. Tu propuesta («son autodeterminables aquellos pueblos en donde existe una amplia porción de la ciudadanía que se quiere autodeterminar») encierra en sí un infierno. ¿Se da el derecho de autodeterminarse a Euskalherría, al País Vasco, al Territorio Histórico de Alava, al Gohierri, a San Sebastián, al Casco Viejo? Con una democracia funcionando, lo suyo es la representación a través del voto y la transacción para el reparto del poder. Eso debería bastar.

    Y me corrijo por haber aceptado tu tacha a Sartorius como «complaciente». De El Cultural de hoy, en el comentario de su libro: «se rechaza la mitificación acrítica que se ha hecho de esta fase… Para Sartorius y Sabio aquella etapa distó mucho de ser un tránsito sosegado y ejemplar; fue un momento convulso, a menudo caótico, a veces sangriento, siempre incierto». Suscribo, aunque interpreto que tú le achacabas más bien que promueva un «relato mítico» desde la izquierda (la transición como fruto de la conquista de las masas) que, obviamente, es incompleto.

    Abrazo.

  31. A Simpapeles (como yo):

    Nadie ha regalado nada. Todo lo que se ha conseguido ha costado sangre y lágrimas (el sudor se supone). Pero no quiero extenderme en ello. Son cosas pasadas, que sólo mueven molinos imaginarios (los del Quijote).
    En la transición que yo conocí, no existía el PSOE. Estaban el PCE (omnipresente) y los grupos que disputaban al PCE la hegemonía desde la izquierda. Tampoco existían, en lo que conozco, los nacionalistas, al menos como son ahora. ETA sí; allí estaba.
    La gente de izquierdas, dispersa en cien partidos, creíamos que teníamos mucha fuerza, y estábamos equivocados. Pero el Gobierno de entonces, el de Suárez sobre todo, también lo creía; y estaba equivocado. Nosotros creíamos en la revolución; ellos la temían. Y la prueba es la actuación policial de entonces, en la que no me voy a extender. Quien quiera que investigue. Todos intentábamos engañar a todos y, al final, nos engañamos a nosotros mismos.
    Las elecciones nos pusieron en nuestro sitio. Y el golpe de estado de Tejero (que sí triunfó) recondujo la transición. Nada fue igual desde entonces. Felipe González, representante de un partido que apenas existió contra Franco ( Sartorius y otros muchos estaban en el Partido Comunista) se convirtió en el icono de la izquierda, sustituyendo lo que hasta entonces hubo, gracias a la ayuda internacional, especialmente de la socialdemocracia alemana. ¿Alguien se acuerda de aquel eslogan que decía «OTAN, de entrada no»?
    Pero, treinta años después, creo que nada de ello tiene demasiada importancia. Como no tiene demasiada importancia el debate sobre la autodeterminación. Y lo digo con sentimiento. En un bar de Gernika, un Aberri Eguna, me partieron la nariz por defender «la autodeterminación de los pueblos». Quien me golpeó quería la independencia, directamente, y con un par. Pero también me rompieron la nariz unos policias de pisano cuando protestábamos por el asesinato de los abogados de Atocha. Y no cuento más, porque recordar hace sentirme mayor, no viejo.
    El problema no es el reconocimiento del derecho de autodeterminación. A mi no me importa la independencia de Cataluña o Euskadi. Lo que me importa es el fascismo que pueda apoderarse de Euskadi, sobre todo. Al menos mientras ETA exista.
    Cuando hablo de los muertos que hemos ido enterrando me refiero, también, a los amigos muertos por la droga, la desesperación, el desánimo, la frustración, el desencanto, el asco…

  32. Siento sin poder deciros lo que hice hace Treinta años Treinta..es que no me acuerdo..¡carajo!.
    Eso si estas ultimas elecciones he disfrutado viendo como mi hijo con veinte años veinte se presento en las listas a su ayuntamiento por el PSOE en el Nº 15.
    Fue la primera vez que votaba ..y encima el jodio..se votaba a si mismo…jeje.

    No lograron la alcaldia pero se quedaron en Nueve (uno mas que en las anteriores)..Mi hijo no gano su concejalia..perro menudo atracon de satisfaccion por el trabajo bien realizado…fuera de la crispacion que nos querian meter .
    Al final en Ibiza les hemos arrebatado en Consell al PP de Matutes y hemos reforzado dos alcaldias y recuperado otra muy importante.
    Blanco vino a vernos a celebrarlo ..aunque no fue un dia feliz del todo..ETA nos decia que seguian siendo los mismos asesinos de siempre.
    Treinta años Treinta…y no me acuerdo de lo que hice aquel dia…¿sera porque hoy he estado viendo la sonrisa y los ojos de mi nieta,todo el dia?.
    Treinta años Treinta….JAJAJA..que nervios.

  33. No lo entiendo, espero que se me aclare por persona autorizada: el rey (con minúscula va de sobras servido) ha hecho una referencia amable y cariñosa a las víctimas del terrorismo, parece que está pendiente una nueva ley (¿otra?) que privilegia a las vícimas del terrorismo…, ¿por qué? ¿Hasta cuándo? ¿Por qué no se atiende con la misma generosidad a las víctimas de la violencia doméstica, a las víctimas de los conductores locos o borrachos, a las víctimas de los accidentes laborales…?

  34. Gracias a ti, arouet.
    Lo que no entiendo es por qué habría de convertirse en un infierno la aplicación del derecho de autodeterminación. Solo en una abstracción hipotética podría darse el caso de esa autodeterminación ad infinitum (y ad nauseam) que tú justamente describes como escenario insoportable. Lo cierto es que la conciencia histórica, cultural o política compartida de una colectividad, la que funda las aspiraciones de una mayoría o de una parte importante de la población a la independencia, no se someten en la realidad de su práctica a ese proceso disgregatorio interminable que temes. O eso me parece. E insisto en que los derechos de esos ciudadanos (a sentirse miembros de una colectividad política diferenciada, a desagregarse de la totalidad en la que hasta entonces estaban subsumidos) son absolutamente legítimos e irrenunciable su reconocimiento desde una praxis auténticamente democrática.
    Añadir algo que no mencioné antes sobre el Poder Judicial y es la clara línea sucesoria entre el TOP y la Audiencia Nacional.
    A lope aguirre:
    Decirte que lo malo de ETA y el derecho de autodeterminación es que a veces puedes ser malinterpretado (no me refiero por ti) y caer bajo la temible advocación de filoterrorista. Me atreveré a incurrir en ella aún más y recordar aquello que decía Espinoza de que un Estado en el que opera un grupo terrorista es un estado injusto. No con ánimo justificatorio, ni mucho menos, sino simplemente como recordatorio de que en la raíz hay un problema y, desde mi punto de vista (compartido por muchos vascos, la inmensa mayoría de los cuales rechazan la violencia terrorista e incluso están expuestos a sufrirla), una injusticia, un no reconocimiento de derechos. Y que unos cuantos descerebrados piensen que para defender ese derecho hay que asesinar no degrada ni contamina la lucha por ese derecho desde planteamientos democráticos. Tal vez, incluso, la vuelve más necesaria. Saludos.

  35. Veo el programa sobre la Transición en TVE y me parece imposible que hayamos sobrevivido a todo aquello. Que hayamos llegado hasta aquí. Qué difícil fue todo. Qué sobresaltos aquellos primeros años. La matanza de Atocha, aquella primera vez en las calles de Madrid con el PCE y todos nosotros saliendo a la calle masivamente, con miedo, sí, había mucho miedo. Y el 27 de febrero otra vez en la calle, otra vez masivamente gritando Democracia sí, dictadura no. Y aquella riada de asesinatos de eta, que parecía imbatible. Recuerdo aquella comparecencia de Martín Villa en TVE diciendo angustiado, «o acabamos con ellos o ellos acaban con nosotros». Que horror, cómo pudo decir eso un Ministro del Interior. Y aun hoy hay algunos insensatos que dicen que estamos peor que nunca…, que eta está más fuerte que nunca. Qué locura.

  36. Abundando en la frase de Permafrost de que «…. quizá deberíamos bajarnos esos humos de «transición modélica» que siempre salen a relucir a las primeras de cambio», creo que resulta interesante conocer otras opiniones distintas a las de Jelloun o Sartorius, cual sucede con la de Joan E. Garcés («Soberanos e intervenidos», Siglo XXI, 1996), cuando dice: » …no todos los grupos politicos existentes en 1977 pudieron presentar candidatos a las elecciones legislativas, ni en igualdad de condiciones los que en ellas participaron….Sólo en la medida en que los equipos politicos -cooptados o no- demostraban que asumian las condiciones prefijadas, se les permitió acudir a la cita electoral. A los exponentes republicanos, de la izquierda nacionalista vasca, gallega y otras nacionalidades, no se les reconocieron los derechos politicos hasta que, mucho después del 15 de junio de 1977,el espacio electoral y el Parlamento estuvieron ocupados por los comprometidos con la programada reforma.»(págs. 179-180). Me ha parecido conveniente traer a confrontación esta tesis con el objetivo de aportar munición al debate -sin confrontación no hay debate-, lo cual no es obstáculo para que me sienta reconocido en el titulo de este articulo: han sido mis mejores treinta años en casi todos los sentidos.

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