Después de la derrota

Jelloun

La derrota de la candidata socialista Segolene Royal ha puesto de manifiesto las limitaciones de la izquierda francesa para contraponer un discurso alternativo al de la derecha. Aunque ha sido meritorio el recorrido de la candidata derrotada parece que una buena parte del voto que ha conseguido aglutinar ha sido más anti-Sarkozy, el famoso TSS (“Todo salvo Sarkozy�) por el miedo que suscita el personaje que a favor de una política alternativa a la que ha venido llevándose a cabo por los gobiernos franceses, en los que Sarkozy ha jugado un papel más que relevante.

No me refiero ahora al hecho, tan destacado estos días en los análisis y balances de la campaña francesa, de que la candidata derrotada no haya sido finalmente capaz de poner en evidencia ese dato fundamental. Me refiero a la dificultad de generar un discurso propio con credibilidad por sí mismo. Una propuesta que no se limite al compromiso de “escucharâ€? a los ciudadanos sino que asuma la responsabilidad de “arriesgarâ€? unas ofertas determinadas, al menos para los problemas más importantes a los que se enfrenta la sociedad que se pretende liderar. Semanas atrás, en este mismo blog, elogiaba la novedad que parecía suponer la actitud de la candidata socialista (“Escucharâ€?, esa es la clave de la precampaña electoral de Ségolène Royal…. escuchar primero, para luego concretar su programa. Escuchar a una ciudadanía que no siente como suyas las preocupaciones que parecen monopolizar el discurso de los profesionales de la política…â€?). Parece que esa primera parte no fué seguida suficientemente de la necesaria concreción de ofertas programáticas –sobre un mínimo de cuestiones al menos-, que permitieran definir el perfil de una alternativa de gobierno.

Decía al respecto André Glucksmann –en un artículo que, de pasada, ya hemos tenido ocasión de comentar aquí- que una victoria de Segolene Royal debiera haberse producido, en su caso, sobre la base de la convicción que transmitiera con sus propuestas y no sólo por la angustia que suscitara Sarkozy. Que sea justificada o no esta angustia es otra cuestión en la que no hay por qué seguir a Glucksman. Sin embargo criticaba –y, al menos en eso, me parece que con razón-, que la campaña de Segolene Royal se incribía en una cierta herencia francesa que caracterizaba como la de quienes ante los conflictos optaban siempre por “no indisponerse con nadie�. Así, la baza de Royal, decía, “es la de no tomar partido entre los defensores del SI en el referendum sobre Europa y los que hicieron triunfar el NO, entre los que algunos tachan de “socioliberales� y los que veneran sus viejas glorias estatistas, entre los propalestinos y los amigos de Israel, los laicos y los simpatizantes del Islam, los atlantistas y los soberanistas, los que celebran y los que deploran las 35 horas, los que quieren limitar la inmigración clandestina y los que quieren regularizaciones masivas, etc�.

Desde otras visiones de la política francesa –no necesariamente identificadas con el proyecto conservador encarnado por el flamante Presidente electo-, pueden intuirse reflexiones similares. Un artículo muy interesante –por lo novedoso del enfoque- del historiador norteamericano Tony Judt pronosticaba que Europa echaría de menos a Chirac contraponiendo ciertos datos de su trayectoria, habitualmente olvidados cuando se menosprecia su figura política, con las debilidades e inconsistencias que apreciaba tanto en el ganador Sarkozy como en la perdedora Royal. Y respecto a la candidata socialista era especialmente caústico: “Segolene Royal…ha evidenciado un complejo de Juana de Arco (en su proclamación de candidatura, el pasado octubre, dijo que oía “llamadasâ€? y que aceptaba “esta misión de conquista en nombre de Franciaâ€?) y ha practicado una demagogia ‘blanda’. En asuntos cruciales como la Constitución de la UE y la admisión de Turquía ha evitado definirse y ha preferido prometer que ‘escuchará al pueblo’.â€?

Esta imagen de Juana de Arco parece que ha tenido fortuna. No hay que valorarla necesariamente en clave peyorativa o crítica. Ayer mismo, era Jean Daniel, director de Le Nouvel Observateur, una de las referencias mediáticas de la izquierda francesa, quien hacía balance tanto de lo conseguido como del fracaso de la candidata en un espléndido artículo que llevaba el significativo titulo de ‘Cuando Juana de Arco cayó derrotada por Bonaparte’, enfatizando las dificultades objetivas a las que se enfrentó la candidata que no supo o no pudo llegar a definir una opción socialdemócrata suficientemente convincente : “Todo el mundo habla de derrota en tono compasivo. Pero, cuando se piensa en la estética del recorrido, se puede decir (siempre que nos distanciemos de la eficacia política) que ha sido una verdadera hazaña. Desde luego, se fió de sus propias fuerzas durante las últimas semanas de la campaña electoral…El hecho de haber escogido el heroísmo de la soledad y la libertad le permitió imponerse, desde el exterior y con la ayuda de la opinión pública, en un partido que no quería saber nada de ella. Sin esa decisión, no habría sido candidata. Pero, al mismo tiempo, haber escogido la soledad le impidió poner a punto un proyecto extremadamente ambicioso: quería conciliar una especie de revolución cultural entre los socialistas franceses con una serie de pasos, por desgracia demasiado tímidos, para avanzar por la vía de la socialdemocracia.�

Pero Segolene Royal ha mostrado determinación para asumir una nueva tarea. Ha dicho que “perdida una batalla, empieza otra� y que quiere encabezarla como líder natural de los socialistas. En un partido poco unido, con gente que no le ha puesto las cosas fáciles, Ségolène Royal (que ha sido un instrumento de innovación, encarnando no sólo una nueva cara sino un método nuevo) puede jugar aún un papel decisivo de agregación y de replanteamiento. De hecho, se ha dicho ya, enfrente no hay una batalla. “Hay dos. Si una es importante: la “tercera vuelta� de las legislativas, el próximo mes de junio, la otra es decisiva: la renovación ideológica y estratégica del PS y de la izquierda�.

Las dificultades para definir una oferta política convincente no son exclusivas, por supuesto, de la izquierda francesa. Basta un somero repaso a las penurias que vive el otrora potentísimo SPD alemán, las incógnitas que se ciernen sobre el laborismo británico post-Blair, el eterno baile de partidos y coaliciones con resonancias botánicas en que se enredan, desde hace más de una década, los progresistas italianos, entre otros casos para darse cuenta de esa relativa incapacidad o fragilidad que están mostrando ahora mismo las izquierdas europeas. Se especula una vez más – es un tema recurrente que ahora reaparece a cuenta del episodio de las elecciones francesas-, con la posibilidad de que estemos asistiendo a nuevos realineamientos políticos, que superarían por obsoleta la vieja distinción izquierda-derecha. ¿Si los conceptos contrapuestos derecha/izquierda han definido el horizonte político y cultural del siglo pasado, nos servirán en el futuro para comprender un mundo que se transforma de manera rápida e inédita? Ese es el desafío.

22 comentarios en “Después de la derrota

  1. Felicidades por tu artículo, Jelloun, por dos motivos: primero, no hablas del TEMA, y, segundo, el análisis es muy bueno. Sí, he de reconocer que pese a lo mucho que me fastidia personalmente que ganase Sarkozy, y pese a la admiración que me suscita Segolene Royal, por haber llegado a donde ha llegado con tanto en contra, han fallado los contenidos en la campaña de la candidata socialista.
    Está muy bien lo de escuchar a la gente y crear grupos de trabajo (bueno, no recuerdo el nombre exacto), y se debería seguir haciendo pero, también es cierto que hay que dar un paso más allá, y traducir toda esa información en propuestas concretas. No ha sabido transmitir con exactitud lo que quería hacer, frente a un Sarkozy sin complejos.
    Como a Jelloun, me ha llamado la atención el análisis de Tony Jutd, por su enfoque. También he leído a Jean Daniel, cómo no, toda una referencia de la izquierda en Francia. El clásico francés de izquierdas compra Le Monde y Le Nouvel Observateur: éstas son sus biblias.
    Por lo demás, parece que la izquierda no encuentra su camino en Europa. Uno de sus principales problemas es que ha dado por buenos los planteamientos económicos liberales, como si fuera la ley de gravitación universal, y partir de ahí, no logran encajar esta visión económica con lo que se supone que es propio de la izquierda: apoyo al más desprotegido, defensa de las minorías, políticas redistributivas.
    No sé, si como muchos sesudos afirman, si la dicotomía izquierda-derecha no sigue siendo válida. Este tema daría para 10 artículos o así, y no llegaríamos a un acuerdo. Lo cierto es que no termina de cuajar otra «clasificación», por así decirlo, y en las elecciones francesas, se impusieron las candidaturas que parecían representar, de modo más claro, a lo que consideramos como derecha e izquierda.
    En cualquier caso, ésto no ha terminado. Falta la «tercera vuelta», y queda por ver cómo respira Sarkozy en sus primeras semanas de mandato. De momento, y en realidad, da la impresión de que actuará como un clásico hombre de derechas…

  2. Allá van unas pistillas en relación con el nuevo presidente de Francia…

    Polémica por el lujoso descanso de Sarkozy

    El presidente electo de Francia descansa en un lujoso yate pagado por un empresario de la comunicación
    09-05-2007 CADENA SER / JOSÉ MAR�A PATIÑO (Corresponsal en París)
    Sarko Maltés –en referencia al personaje de Hugo Prat- o incluso pequeño Napoleón –en alusión a la estancia que el entonces futuro Emperador hizo en la isla de Malta tras la campaña de Egipto- son algunos de los apodos que hoy aparecen en la prensa francesa después de que se haya desvelado que el presidente electo de Francia descansa en un yate –con 12 habitaciones, un jacuzzi y cuatro pantallas de plasma- propiedad de un empresario, que también paga de su bolsillo el jet privado que le devolverá con su familia está noche a París.

    En total, 200.000 euros que han puesto en bandeja a la izquierda la denuncia de la contradicción que existe entre estas vacaciones de lujo y la austeridad prometida por Nicolas Sarkozy en campaña.
    La polémica es tan importante que el propio Sarkozy tuvo que salir al paso esta mañana con unas declaraciones mientras hacía footing por la isla, en las que asegura que «no tiene nada que ocultar» y que «los franceses no se dejan engañar por polémicas politiqueras».

    El nuevo presidente francés asegura que ha mantenido numeroso contactos telefónicos con dirigentes de todo el mundo. Incluidos dos humoristas que se han hecho pasar por el primer ministro de Canadá, quien le propone una cena a tres con George Bush porque siempre ha soñado con hacer «una cena de idiotas».

    Los estudiantes de la Sorbona contra Sarkozy

    Los estudiantes retoman la bandera de la protesta que hace un año hizo retroceder al gobierno de Dominique de Villepin por la introducción del Contrato Primer Empleo.

    Entre 600 y 800 universitarios de la Sorbona reunidos en asamblea en uno de los recintos han decidido convocar una huelga y bloquear el acceso y los ascensores de uno de los recintos de la universidad parisina. La medida pretende contestar las reformas de la enseñanza universitaria propuestas por el presidente electo.

    El principal sindicato de estudiantes se muestra en contra de la protesta por considerarla antidemocrática –al no aceptar el voto del pasado domingo- y contraproducente porque se opone a unas medidas que aún deberán ser negociadas con los representante estudiantiles.

    Al mismo tiempo, la socialista Ségolène Royal y su compañero, François Hollande, han presentado una querella contra dos periodistas de Le Monde, autores del libro La mujer fatal, en el que se cuestionan las buenas relaciones de la pareja.

  3. Hola, quería comentaros una anécdota. Ayer vino a dar una conferencia a mi colegio mayor Enrique Múgica. Después de la conferencia, tuve la oportunidad de cenar con él junto con el director y el subdirector de mi colegio. La verdad es que como conferenciante deja mucho que desear porque su conferencia fue aburrida porque leyó absolutamente todo. De todos modos, en la cena pude hablar con él y me comentó anécdotas del 23-F, así como su opinión sobre el conflicto en Oriente Próximo y otros temas. No quiso hablar de los tres años de gobierno socialista y habla del “mal llamado proceso de paz�. La verdad es que discutí un poco con él sobre este tema pero fue en un clima tranquilo. Sinceramente, fue un gusto conocerle a pesar de no compartir parte de sus tesis actuales. Contó anécdotas sobre Euskadi muy enriquecedoras y dijo que “sigue siendo socialista�. Un saludo a todos.

  4. No creo que la diferencia izquierda-derecha esté caduca. Pero depende mucho de donde. En Gran Bretaña los tories son pro aborto, pro divorcio y pro todo incluida inmigración musulmana y demás, nada que ver con la carcundia nacional. No hay diferencia moral. Las diferencias en lo económico son respecto al tamaño del sector público y el grado de intervencionismo del Gobierno. Y también una táctica sobre si al bien general se llega creciendo a espuertas y luego repartiendo o compensando las inequidades sociales con subsidios públicos para que al menos haya igualdad de competencia.
    No conozco Alemania muy bien pero creo que es más o menos similar aunque algo más escoradas todas las posiciones hacia lo público.
    En Francia Le Pen y los suyos han reintroducido en la agenda algunos de los temas de la carcundia, que ahora se reflejan en el debate político general. Pero el «facha» de Sarkozy que quiere limpiar las calles de gentuza (morisca) quiere también establecer métodos de discriminación positiva en la educación para los inmigrantes. Os imaginais a un señor de ribetes autoritarios, bajito como Sarkozy, con mayoría absoluta y proponiendo a la opinión pública conservadora española discriminación positiva para los inmigrantes en España? Ojalá pudiéramos.
    Aquí seguimos en gran parte en el S XIX, la derecha en gran medida contra el progreso y la izquierda a favor. Por eso yo soy de izquierdas y por eso no podré nunca votar al PP incluso si el líder o candidato son individualmente mejores que los del PSOE. Es que no sintonizamos en nada, ni laicidad, ni proclividad al mestizaje, ni cuantos más derechos civiles mejor, nada de nada.
    Y eso que yo en lo económico no creo en la ideología. Haberla hayla, varias, pero una funciona mejor que las demás. Y se puede aplicar bien, regular o mal. Y en eso sí creo, en la necesidad de que los gestores sean sensatos, profesionales y con sentido común. El problema es que si son del PP además me religiosizan el colegio, el hospital, me meten al Papa en el telediario, me cortan la investigación con células madre, etc. Por eso prefiero que encontremos buenos gestores económicos en el PSOE.
    En fin, el pepero más moderno sería Ruiz Gallardón. Y aun así tiene ese toque pijo empollón – además de una pléyade de colaboradores que aún conserva la camisa azul de las manis en 20-N – que me hace sentir que todo lo «progre» que hace no es por convicción sino por utilitarismo.
    Y con ésto quería acabar, mandándole un mensaje de ánimo y apoyo a Miguel Sebastián. Todas las encuestas parece estar en su contra como es de ley dado que no lo conocía nadie, no es profesional de la política y sólo ha tenido un breve semestre. Pero por eso mismo no tiene nada que perder y puede y debe emplearse a fondo esta noche en el debate. Yo estaré atento porque se que tiene una opción de acorralar a Gallardón contra las cuerdas. Y espero verla y que luego lo tumbe en el segundo debate la semana que viene. Amen. Sí se puede! Sí se puede!

  5. Felicidades por tu artículo, Jelloun. Como siempre, das en el clavo. Dijo Sarkozy que se iba a caracterizar por la «austeridad». Joder, pues sí que lo incumple pronto. Ya visteis todos en la prensa las vacaciones que se está pegando el buen hombre en Malta.

  6. Como nadie se atreve a decir nada sobre ETA os cuelgo el final del artículo de P Unzueta en el País hoy, con el que estoy completamente de acuerdo.
    «La dependencia de Batasuna respecto a ETA se mantiene, por tanto, y mientras esa sea la situación no se ven razones para que el Gobierno haga movimientos, por acción u omisión, que ese mundo pueda interpretar como de disponibilidad para favorecer la presencia del brazo político en al menos algunas instituciones. La idea de que esa presencia reforzaría a los sectores más favorables al abandono de las armas pudo tener sentido hasta el 30 de diciembre. Ahora más bien reforzaría a los txerokis que instaban hace seis meses a «convertir la necesidad que el Gobierno español tiene con el proceso (intereses electorales entre otros) en (…) un factor que usemos a nuestro favor a la hora de diseñar nuestras iniciativas y nuestra estrategia de presión».»

  7. Gracias, Jelloun, por tus reflexiones, que me suscitan otras, fragmentarias;

    – Mi impresión es que el PSF no ha hecho la renovación que exigía la debacle de 2002. Aunque la pluralidad sea un valor, mantener dentro de la misma fuerza política opciones estratégicas tan contrapuestas como el sí y el no a la Constitución europea es, más que saludable discrepancia, un guirigay (que no quiere decir extranjero homosexual, aclaro).

    – En tiempos turbios, la claridad es un bonus. Puede que los mensajes primarios no nos satisfagan intelectualmente, pero sirven para orientar al personal, que se tranquiliza y refugia en liderazgos «fuertes» como el que proponía Sarkozy.

    – Derechas/izquierdas: una de las cosas que más me entristecen es cómo se ha asumido, también en España, el retroceso de lo público como algo necesario y «reformista»; y estamos retrocediendo mucho antes de haber llegado. En Francia es posible que estén ahitos de prestaciones sociales: 54% de gasto público sobre PIB. En España estamos como quince puntos por debajo. Dice el Presidente que «bajar impuestos es de izquierdas»; pues no. Es de izquierdas bajárselos a los pobres, no a los ricos. He leído al Director de la Oficina Económica de la Presidencia que «no entiende» la existencia de los impuestos de sucesiones y sobre patrimonio… Tenemos un grave problema.

    Abrazos para todos.

  8. ¿Por qué lo público es más de izquierdas que lo privado? Lo que es más de izquierdas es trabajar en pos de la igualdad de oportunidades y un nivel de vida mínimo para aquéllos que aún así no consigan valerse por si solos. A mi no me importa si el hospital es público o privado. Me importa que traten a todo el mundo por igual, que las prestaciones sean buenas, que sea eficiente. Si se consigue mejor con titularidad pública, adelante. Pero si es más eficiente con gestión privada ¿por qué no?
    Cuando la realidad mundial impone la liberalización, por ejemplo la de capitales, y cuando formar una sociedad para «optimizar» la fiscalidad está al alcance de casi todo el mundo ¿es de izquierdas seguir gravando con una alta tasa de IRPF a los asalariados?

  9. Vexata quaestio, TCEC. Enseñanza y sanidad PUBLICAS, por favor; que garanticen al ciudadano una prestación de servicios de calidad, sin oscurantismos religiosos o empresariales, y en igualdad de condiciones. No nos vengas con la vaina de que la «gestión privada» de servicios esenciales puede ser «más eficiente». No estamos en Finlandia. Aquí las cosas son muy claras, y la defensa de lo privado en estos ámbitos es el modelo de negociete «liberal» de Esperanza Aguirre. Comprendo, en tu condición de automivilista liberal, tu admiración por ella; pero yo he sido operado en La Paz bajo su mandato y conozco de qué va el percal. El debate teórico está fuera de lugar.

    El IRPF tiene, es verdad, efectos prácticos regresivos debido a su masiva elusión por parte del empresariado. El problema no es el impuesto, sino su mala gestión. De eso ya hemos hablado. A lo que yo me refería era a las incomprensibles declaraciones de Taguas sobre los impuestos de sucesiones y patrimonio. ¿Tú también eres partidario de suprimirlos?
    _______-

    Me parecen más interesantes las opiniones del Rey sobre Irlanda. ¿Hizo bien en emitirlas? Aunque el fondo nos complazca, ¿no está el Borbón mejor callado que metiéndose en procelosos jardines? Le salva, creo, que dijo lo que dijo en una charla informal con la prensa. Pero, ¿y si hubiera dicho que el «proceso de paz» en inviable y totalmente incomparable con la situación del Ulster?

    Abrazos.

  10. Yo no he mencionado los colegios. Prefiero que sean públicos, por la especial misión de la educación en la formación de los ciudadanos, y privados sin ninguna subvención para el que quiera.
    En cuanto a la sanidad yo decía simplemente que si se puede imponer eficazmente a una empresa unos criterios de gestión iguales o mejores que los públicos y eso funciona (cosa que no se), entonces por qué no? Son los hospitales intrínsecamente diferentes a las autopistas? Si lo son entonces nada. Pero no lo tengo claro.
    Una cosa es perseguir el fraude fiscal y otra impedir la «optimización», algo imposible en nuestro entorno internacional. Si los países vecinos no tienen patrimonio y sucesiones veo difícil mantenerlos, por mucho que tenga mucho sentido redistributivo originariamente. Pero ahora mismo no tienen tal efecto. Está lleno el mundo de pisos a nombre de padres e hijos, sociedades familiares ad hoc para «optimizar» precisamente el pago de dichos impuestos. Y cuando una batalla está perdida, mejor no lucharla.
    Y finalmente sobre el Rey. No es lo mismo que haga un comentario en apoyo, implícito e informalmente, de una política del Gobierno que en contra, algo que no debe hacer en ningún caso. Pero a favor no veo por qué no, especialmente si es a colación de un acontecimiento internacional, área en la que sí tiene competencias, subordinadas al Gobierno, por supuesto.

  11. Millan, no leiste lo de que Agag es íntimo de Bernie Ecclestone? Eso lo explica todo.
    Bueno, menos de una hora para que Miguel salga al ruedo. Valor y al toro!

  12. Escribo en el intermedio. Me parece que Miguel lo está haciendo bien, citando ejemplos humanos y dando datos «entendibles». El Faraón en cambio me da imagen de empollón, leyendo demasiado y demasiado rápido, de hecho ya no recuerdo ni lo que ha leído. Y creo que está pareciendo demasiado agresivo con lo de «dele el papel al moderador» (no se me acerque), «no me interrumpa» (antes de que se viera que Miguel le iba a interrumpir.
    Lo único que le criticaría a Miguel es que está demasiado acartonado, demasiado actuado, poco espontáneo. A ver si se suelta un poco más. Buenísima la respuesta a lo de las OPAs con lo de la querella de la COPE.
    En algún momento tendría que decir que él no gobernaba en la anterior fase del PSOE y que en cambio los resultados desde la Oficina económica han sido muy buenos.

  13. Gallardón se ha puesto nervioso. No esta acostuymbrado a que le apabullen con datos y argumentos y ha querido morder en los tobillos de Sebastián diciéndole que abandone su aire de superioridad intelectual.
    Ha habido momentos muy brillantes y camiones de dataos.
    Desde luego a nadie le podría quedar ya la duda de que Sebastián es un piernas. Gallardón se ha puesto nervioso y más aún cuando sebastián le ha dado dos papeles que desmentían sus promesas.
    Buen nivel y Sebastián cuajado frente a un Gallardón que encajaba los golpes con mala gaita.

  14. Me ha gustado Miguel, mucho más positivo, haciendo propuestas y nombrando barrios y distritos por su nombre en cada turno. Gallardón ni uno, dedicando uno de sus dos minutos finales a atacar personalmente a Miguel.
    Miguel miraba demasiado al moderador y cuando lo hacía a la cámara ladeaba la cabeza. A Gallardón la chaqueta del traje le sentaba fatal y su mensaje agresivo y negativo tendrá calado en los votantes de la cope pero no en el centro.
    El formato tan rígido no beneficiaba en nada a Miguel, que no ha llegado a soltarse del todo. Pero creo sinceramente que Gallardón lo ha hecho peor, ha trasnmitido mal rollo casi todo el rato.

  15. Gallardon es muy chulo, muy prepotente y ha hecho referencias permanentes a Sebastián y su lejanía de los ciudadanos. Le ha querido dar con lo de la CNMV ySebastián le ha cortado en seco. Solo se ha atrevido a citarlo otra vez cuando sabía que no había posible réplica.
    La segunda vuelta del debate, en TVE, se promete apasionante.

  16. Miguel Sebastián podía haber rematado a Gallardón si le hubiera dejado los papeles en su atril, como hizo en un primer momento. Gallardón estuvo a punto de tirarlos al suelo del cabreo que se cogió. Le dijo a Sebastián que se los diera al moderador. No tenía que haberlo hecho, los papeles le interpelaban a Gallardón que , es verdad, ha dado una permanente sensación de cabreo permanente. Gallardón ha estado agresivo, se veía que iba con miedo de los datos, cuadros y gráficos de Miguel. Se lo ha preparado para evitar quedar en inferioridad.
    La disposición de los tres favorecía a G y perjudicaba a M Sebastián. Pero este ha dejado claro que puede gobernar Madrid. Ha hablado de ciudadanos, de personas, de problemas concretos y ha demostrado que se lo sabe.

  17. Gallardón ha hecho un debate sucio. En cada una de sus intervenciones ha hecho alusión a factores que no tenían nada que ver con la alcaldía de Madrid: ha hecho alusiones a las Opas insinuando Dios sabe qué, a los despachos de la Moncloa ¡o del BBVA!, ¡¡¡ a la estancia de Sebastián en Estados Unidos!!!´(parece considerar un delito haber ido a estudiar allí, y parece desconocer que Sebastián volvió hace veinte años), le ha reclamado responsabilidades por lo que el Estado había hecho con los 52 euros de cada 100 pagados por los madrileños…. Yo creo que es la primera vez que Gallardón se encuentra con un rival al que considera un peligro. A pesar del tonillo y la sonrisa de suficiencia y superioridad con los que trataba a Sebastián, hubo momentos en los que se le vio realmente nervioso, leyendo deprisa de modo poco inteligible.

    Empieza la campaña.

  18. Bueno, bueno, lástima haberme perdido semejante espectáculo. ¿y para cuando es esa segunda parte en TVE?

  19. Jelloun: el día 16 a las 10 de la noche.

    He oído un trozo de la tertulia de Onda Cero, dirigida por Alsina, ese genio del humor y de las ondas que aburre a las ovejas, ayudado por Pilar Cernuda y por un andaluz que no sé cómo se llama. Salió «e tema Conthe» y me pareció entender que el Mundo dice que este señor dice que si le llama un juez, él va y le cuenta «todo». Surrealismo puro. Y estos tres periodistas tertulianos, tan bien descritos por Polonio210 en aquel genial artículo dominguero , en lugar de pronunciar aquellas cinco famosas palabras, se pusieron a «desarrollar el tema», diciendo cada uno un despropósito mayor que el otro. Parecía el patio de vecinos de «Aquí no hay quién viva». Lamentable. Por supuesto a todos ellos les parecía que Miguel Sebastián había estado fatal en el debate (que ninguno de ellos había visto, claro).

  20. En el próximo debate Sebastián tendría que preguntarle a Gallardón si va a cumplir su mandato de 4 años porque si gana irá de número 2 con Rajoy, presto a dar la batalla para sustituirle si se la pega en 2008, dejándonos a la Botella como alcaldesa. Esa perspectiva es completamente real si gana Gallardón y Sebastián tendría que explotarla porque es negra negra.
    Ah, perdón, pero el TC ha validado la impugnación de las listas de ANV. No he podido evitar mencionarlo…

  21. Según el guión previsto, parece que el TC revalida la decisión del T Supremo sobre las listas de ANV. Tal para cual. País de marionetas.

    Veo -algo con lo que reconfortarme-, que mi opinión sobre lo que debiera haberse hecho con las candidaturas de ANv coinide con la mayoría ( a estas horas al menos) de los lectores de El País. com que se han pronunciado en la «encuesta» promovida por el diario. Algo es algo.

    No me iré a Leroy Merlin, destino de algunos blogeros en momentos de tribulación, según sus confesiones. Todo lo más, reflexionaré sobre si me quedo en mi casa el día 27. No parece que vaya a ser ilegalizado el derecho al pataleo.

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