Arriba ese ánimo

Alberto Penadés

Ayer mismo me enteré por un amigo de una producción de TVE que, como homenaje a Gila, ha escogido este título alarmante. Gila realmente se habría partido de la risa y habría hecho grandes chistes negros. Lo imagino al teléfono repitiendo eso de “chico, es que como en España no se vive en ninguna parte”.  Acuciado por esta imagen, le he dedicado un rato a leer tres informes (referencias abajo) que comparan España con otros países en cuestiones subjetivas, objetivas y hasta intangibles. Comparto aquí una breve reseña.

En 2007 España era el país más satisfecho con su situación general  como país y con su economía de los ocho países en los que el centro PEW de investigación hacía la pregunta: EEUU, GB, Francia, Alemania, Italia, Polonia y República Checa, además de en España.  Y con diferencias muy notables: si el 51% de los españoles estaba satisfecho, solo lo estaban el 33% de los alemanes o el 25% de los estadounidenses. Entre 2007 y 2012 la satisfacción con el propio país ha caído  41 puntos (de 51 a 10) y la satisfacción con la economía  59 (de 65 a 6). En picado, de los más contentos  a los más desgraciados, salvo Grecia (que no estaba incluida en 2007, y donde literalmente casi nadie cree que  la situación sea buena).  Alemanes, franceses y estadounidenses están ahora más satisfechos con su país que hace cinco años, aunque solo entre los Alemanes ha crecido el número de quienes piensan que la economía  está en buena situación.  A los españoles se nos calienta la boca fácilmente, pero de vez en cuando la realidad nos corrige.

En cierto modo, se diría que los ciudadanos españoles son conscientes de haber vivido un tiempo que no volverá. Este es el dato especialmente malo, en mi opinión. España es el único país donde simultáneamente la mayoría cree  haber superado a la generación anterior y cree que la generación siguiente lo tendrá peor que la actual. Para el 71% de los españoles su vida es mejor que la de sus padres a la misma edad.  De los 9 países donde se hace la pregunta, es el dato más alto, acompañado únicamente por Alemania (70%) en esa visión retrospectiva.  Para el resto el dato es mucho más bajo. Tres hurras por nuestros padres, que nos trajeron aquí. Al mismo tiempo,  el 69%  de los españoles cree que es  “muy difícil” para una persona joven “encontrar un trabajo mejor y llegar a estar más acomodado que sus padres”.  Es decir: lo sentimos, se nos fue la mano. (La culpa se la echamos a los bancos, a los políticos… con razón seguramente, pero la estupidez se paga).  Solo los griegos ven peor la movilidad futura (el 73% es de esa opinión).  En el otro extremo, solo el 23% de los alemanes, el 37% de los franceses o el 39% de los estadounidenses ven así el futuro de sus hijos.

En paralelo a esto,  el apoyo a la economía de mercado desciende hasta el 47%, 20 puntos menos que hace 5 años, siendo el más bajo de Europa, detrás de Grecia, naturalmente. También se ha reducido 20 puntos el porcentaje de quienes tienen una visión favorable de la UE (del 80 al 60), quedándonos en una cifra más típica europea.  Solo una minoría cree que el euro sea una buena cosa (la moneda única es ahora popular en los extremos: Alemania y Grecia, no en el resto de los países), pero como en todos los países de la zona, los españoles creen que es mejor seguir dentro. Todo esto muestra cierta desorientación, que también se refleja en la división de opiniones sobre el ajuste (para el 45% ha ido demasiado lejos, para el resto es justo o insuficiente). Queremos que “nos” lo arreglen; no sabemos quién.

La impresión de haberse vivido muy bien no creo que haya estado nunca justificada. Nos faltaba mucho de lo esencial para  vivir realmente bien, como se vive en el Norte de Europa. El informe de la OCDE sobre el Índice de la Buena Vida (Better Life Index, me resisto a traducirlo por índice de mejor vida), que se ocupa de magnitudes más estables que las meras impresiones subjetivas (aunque también las toma en cuenta), deja a España en una posición poco envidiable. En torno a la media de la OCDE, a veces por debajo, dependiendo de los indicadores, y casi siempre bastante por debajo de los países de nuestro entorno socioeconómico. Las dimensiones son vivienda, ingresos, trabajo, comunidad, educación, medio ambiente, civismo, salud, satisfacción con la vida, seguridad y equilibrio entre vida personal y trabajo.  Adivinen en qué dimensión España puntúa realmente alto. Correcto, en la última: los terceros más equilibrados, de 36. En concreto, el segundo país donde más horas se dedican al ocio y cuidado personal (tras Dinamarca), además de padecer un número relativamente bajo de personas con jornadas de trabajo muy largas. Nos lo estropea un poco la desigualdad de género.

Otras dimensiones en las que la puntuación es aceptable son la salud y la “comunidad”: la sensación de que la gente puede ayudarte,  lo que si el índice lo hubieran construido manos ibéricas se habría llamado simplemente “la familia”. Lo demás, con especial énfasis en empleo y educación, fatal.  Vergüenza debería dar a nuestros administradores.

Tal vez se piense que en España debería ser alta la satisfacción con la vida, pero no.  Lo llamativo en ese componente del índice es la desigualdad: España es el país de la OCDE donde mayores desigualdades hay en la satisfacción con la vida (tras Estonia, que parece un dato atípico). Para el 20% de mayor estatus socioeconómico la vida es tan satisfactoria como para los daneses o suizos. Para el 20% de abajo la vida es tan sombría como en los lugares más pesimistas de la OCDE. La desigualdad en felicidad es mayor que la desigualdad objetiva, en renta, que no es poca.

Buscando datos positivos en Twitter los optimistas me remitieron a un informe internacional  sobre branding  -sobre la “marca” de distintos países-  para que comprobara que España tenía una puntuación bastante alta en muchas dimensiones. El resultado es más que decepcionante. España no asoma en la lista de ningún indicador importante. Simplemente, la “marca España” no está entre las primeras, ni entre las segundas, ni  terceras, en nada que valga la pena; ni en la media, lógicamente. Hay gente que dice en serio que debemos alegrarnos porque en opinión de la gente somos la cuarta potencia en comida apetecible. La incomprensible nostalgia del chorizo y la paella de menudillos que parece sentir todo ibero cuando viaja.  Pero ni siquiera en la mayor parte de estos intangibles que hacen a un país atractivo España encuentra un lugar para presumir. ¿Creíamos realmente que el país transmite algo que pueda compararse con Canadá o Suecia?

Un país en el que resulta rentable negar la crisis cuando aparece, y hablar de fútbol cuando hay que buscar soluciones, creo que no puede engañar a nadie. Los jóvenes se quieren ir, los que puedan lo harán. El último que apague la luz.

Fuentes:

PEW Global Attitudes Project

http://www.pewglobal.org/files/2012/05/Pew-Global-Attitudes-Project-European-Crisis-Report-FINAL-FOR-PRINT-May-29-2012.pdf

OCDE, Better Life Index, Spain

http://www.oecdbetterlifeindex.org/countries/spain/

Country Brand Index 2011-12

http://www.futurebrand.com/wp-content/uploads/2011/11/2011_2012_FB_CBI_ENG.pdf

Arriba ese ánimo (TVE).

http://www.rtve.es/alacarta/videos/telediario/arriba-ese-animo-mejores-humoristas-rinden-homenaje-miguel-gila/1411963/ 

(Por cierto, que la OCDE ha construido un juguete para que cada cual le dé el peso que le parezca convincente a las dimensiones del índice de la buena vida y luego observar los resultados por países; puede verse en su página web)

4 comentarios en “Arriba ese ánimo

  1. Muy bueno el artículo y extraño que con tantas visitas no haya más comentarios. Sí, nuestro país sigue muy atrás en muchas cosas, en particular en cuanto a hábitos democráticos. Hoy durante la comida un extranjero me decía que inevitablemente PP y PSOE iban a formar un gobierno de unidad nacional muy pronto. Le respondí que ojalá pero que me temía que el PP se negaría en redondo a compartir el poder y que el PSOE, en caso de oferta, la rechazaría para no cargar con más responsabilidad por la debacle. Así estamos. Eso sí, con opciones para ganar la Eurocopa! Bien!!!!
    Por cierto, la semana pasada hablé con varios amigos bien situados en los pasillos del poder de Bruselas. Hasta los del PP me decían que no entendían cómo le cuesta tanto al Gobierno entender de qué va la cosa y empezar a dar respuestas a las inquietudes y dejar de meter la pata. El que piense que nos van a sacar las castañas del fuego que se vaya olvidando, rápidamente…

  2. » …… ese informe no consta en la documentación que la Junta le remitió a la juez hace 14 meses, y sí en la segunda remesa de papeles que el Juzgado recibió la pasada semana sobre el expediente de las subvenciones a Cárnicas Molina. ……»

    Según el refrán ….» las cosas de Palacio van despacio», pero, por lo visto, si son cosas del Palacio de San Telmo, sede de la presidencia de gobierno andaluz, todavía van más lentas. Ya parece que han enviado la documentación pedida por la juez hace 14 meses.
    http://www.abcdesevilla.es/20120604/andalucia/sevi-dice-grinan-actua-como-201206041433.html

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