Oscar de la Torre
Cuando se estudia el racismo y las desigualdades raciales en el presente, tanto en el estado español como en todo el mundo, hay una paradoja que llama poderosamente la atención. ¿Cómo es posible que siendo el racismo una ideología mayoritariamente superada a nivel intelectual y político sigan existiendo desigualdades raciales flagrantes en el mundo occidental? Esta pregunta es de especial interés en España. En Europa, en general, se ve el racismo y la xenofobia como un problema secundario, pese a que es uno de los principales motivos por los cuales las clases populares europeas pasaron de votar a los partidos de izquierda a votar a los de derechas durante la revolución conservadora de los años ochenta y noventa. Y el racismo y la xenofobia explica acontecimientos recientes y cruciales, como por ejemplo el Brexit, ni más ni menos. Así es, lisa y llanamente. El Brexit ganó principalmente gracias a los discursos xenófobos. Sigue leyendo