Citando a Churchill en Navarra

Oferta para socialistas enfadados

Oferta para socialistas enfadados

Guridi

«Os dieron a elegir entre dejar impune la corrupción o perder votos, elegisteis la impunidad y no tendréis los votos»

Los orígenes de todo esto no son tan tremendos como su resultado. Roberto Jiménez se sentía acosado ante su última oportunidad de poder plantar cara a UPN, tras haber gobernado con ellos porque a Pepe Blanco también le daba miedo que el PP les relacionase con Bildu.

Con un PSN que se veía cada vez más menguante en votos y más desconectado de la sociedad navarra, con Nafarroa Bai comiéndoles el terreno por la izquierda. Jiménez, que sabía que su apoyo a Chacón en Sevilla le iba a salir caro, creyó que tenía que hacer algo. Lo que fuera. A toda prisa. No sé cómo pensó que en algún momento Rubalcaba le permitiría hacerlo. Para un ex-ministro del Interior al que se le difamó diciendo que entregaba Navarra a ETA, el que te mencionen en la misma frase que a Bildu es inaceptable.

Si, además, los estrategas de Ferraz creen de verdad que sus encuestas dicen que se pierden menos votos consintiendo los escandalosos latrocinios de Barcina y su banda, que lanzando una moción de censura para quitarla de en medio… No hay nada que hacer.

No estoy seguro de que no se haya hecho lo correcto y estamos en el sitio al que nos ha llevado un camino lleno de errores, tropezones, chapuzas y oportunismo. Detrás de todo esto hay más de lo que trasciende a primera vista. Pero hay una cosa clara: lo que han percibido nuestros militantes -y nuestros votantes más izquierdistas-, es que hemos sido blandos con un flagrante caso de corrupción en cuanto nos han agitado el espantajo etarra.

Como tantas otras decisiones de la era Rubalcaba, puede que sea lo correcto pero no va a haber manera de explicar esto a la gente, nos va a costar apoyos que no se recuperarán y se percibe como otra traición a los principios del PSOE.

Cruzo los dedos para el «Efecto Valenciano» resuelva esto a gusto de todos en las elecciones.