Lobisón
 Ante la primera vuelta de las elecciones en Perú, ayer domingo, El PaÃs titulaba: “El ascenso del populista Humala inquieta a las clases medias de Perúâ€. Aparentemente esto tiene sentido, pues Ollanta Humala se vinculaba inicialmente a una ideologÃa llamada etno-cacerismo, es decir, a un violento nacionalismo (antichileno) y a unos planteamientos anticriollos que le aproximaban a las revindicaciones étnicas de Morales en Bolivia. Con un poco de ayuda de Chávez, además, era muy fácil presentarle como un peón de la estrategia bolivariana de expansión por la región.
Pero desde 2006 Ollanta ha ido evolucionando, y es notorio que en esta campaña se ha visto asesorado por los consultores de imagen de Lula, lo que al menos siembra dudas sobre lo que su elección podrÃa representar. Lula ha mantenido durante sus dos perÃodos en la presidencia de Brasil unas relaciones ambiguas con Chávez, pero casi nadie duda de que los dos representan formas distintas de gobernar. En este sentido se podrÃa decir que Ollanta ha emprendido una travesÃa de Chávez a Lula, y la pregunta es si la supuesta inquietud de las clases medias peruanas serÃa consecuencia de que no están convencidos de que haya llegado a puerto.