Ricardo ParelladaÂ
En las últimas semanas parece haber salido un mensaje muy curioso de los aledaños del gobierno: como damos por perdidas las próximas elecciones generales, podemos llevar a cabo con toda determinación las polÃticas que consideramos más convenientes para España, con independencia de que la opinión pública lo comprenda bien o no. Al estar hundidos en las encuestas y dar por perdida la posibilidad de seguir gobernando tras las próximas elecciones, el gobierno, paradójicamente, experimenta una cierta liberación del dÃa a dÃa, las encuestas y la opinión y puede dedicarse plenamente a gobernar.
 Se trata de un fenómeno parecido a lo que cuentan que ocurre en EEUU y otros paÃses con limitación de mandatos presidenciales: los dos primeros años se gobierna, los dos siguientes se prepara la reelección y, si hay un segundo mandato, entonces el presidente puede impulsar las polÃticas en las que realmente cree, sin tener que preocuparse por la reelección.