Sorpresa: un negro y una mujer

Humberto Chao, desde Des Moins, Iowa. (Traducciín de J.O.)
 
Barak Obama ha ganado las primarias de Iowa por ocho puntos sobre sus competidores demócratas, y John Edwards por dos puntos sobre Hilaria Clinton. Qué extraordinario que un estado blanco y rural haya elegido con tanta mayorí­a a un afro-americano! Cuánto ha cambiado este país! Hace solo unos años la candidatura de otro afro-americano, Colin Powell, fue considerada impensable. Una victoria decisiva para la campaña nacional de Obama y un descalabro sorprendente para la ambiciosa Hilaria. Pero Iowa es un estado pequeño, poco más de dos millones de habitantes y un porcentaje rural del 39%. Los cáucasos de Iowa por muy maravilloso que sea su procedimiento arrojan resultados poco representativos. Republicanos y Demócratas se reúnen en 1748 centros para debatir las candidaturas y los programas electorales. Pero asisten solo los que quieren desplazarse de sus casas para pasar una noche de debate (es decir, la clientela típica de Debate Callejero). Este año ha acudido el doble de gente que en 2004, pero aun así­ no es mucho más del 10% del censo. De esta manera, son los más activistas y radicales los que deciden el resultado. El sistema ha estimulado una cultura polí­tica de activistas: conservadores muy de derechas y evangélicos muy religiosos constituye la mayorÃía de los republicanos. Libertarios, sindicatos laborales y la juventud entusiasmada (muy numerosa por estar de vacaciones escolares) la mayoría de los demócratas. Sigue leyendo