Lope Agirre
Dicen que la vida, el mundo, todo lo que es medido y cuantificado, está dominado por el azar. Hay un poema de Mallarmé (o bien armé, según), que se titula: “Una jugada de dados jamás abolirá el azarâ€. Antes se jugaba más a los dados, por variar y ver quién amortizaba la ronda del bar, para que no lo hiciera el mismo siempre. Luego se puso de moda jugar a los chinos, pero siempre acababa pagando el mismo pagano o “paganiniâ€, como lo llamaban en las pelÃculas de Alfredo Landa y José Sazatornil, que hacÃa de glorioso guardia civil en la pelÃcula “Amanece que no es pocoâ€. Unos soldados se jugaron, allá en Bosnia, la ronda a la ruleta rusa. El juego no abolió el azar, pero el azar abolió a varios de ellos.