Permafrost
Mi artÃculo de hoy tiene algo de ligera catilinaria, aunque no es difÃcil generalizar su idea subyacente. Digo lo primero porque tomo como caso de estudio a una de las figurillas que revolotean en el santoral patrio de la carcunda carpetovetónica, y lo segundo porque tal personaje no es objeto de mi atención por especial merecimiento, sino como mera ilustración de una categorÃa harto frecuente en los mentideros (nunca mejor dicho) de nuestro desolador panorama mediático. El sujeto de mi malsana curiosidad no es otro que Ignacio Villa, director de los servicios informativos (?) de la cadena COPE. Pero, para no enajenarme inmediatamente a quienes, con buen criterio, recelan de los personalismos, ofreceré primero la reflexión general. El resto será un aditamento para quienes compartan mi morboso interés por la documentación de necedades. Lo que distingue al sectario partidista del común de los mortales no es que aquél presente caracterÃsticas de las que éste carece, sino que las manifieste en extremos patológicos.