¿Bella Italia?

Marta

 

No cabe la menor duda de que Italia es un país hermoso y fascinante. En cualquier rincón de la bota a dónde uno vaya, siempre encontrará bonitos paisajes, impresionantes monumentos, así como pueblos y ciudades en los que uno se quedaría a vivir, así, por las buenas, como la protagonista de “Bajo el sol de la Toscana”. Los italianos, al menos con los que yo he tenido trato, son gente cercana y cordial.

 

Sin embargo, si repasamos algunos de los acontecimientos más destacados de Italia de estos últimos tiempos, la imagen que ofrece, al menos de cara al exterior, y siempre según las informaciones que nos llegan a través de los medios de comunicación, nos encontramos con un panorama muy poco edificante, por emplear un término lo más suave posible.

 

Ya el simple hecho de tener a alguien como Silvio Berlusconi como primer ministro, elegido además, por tercera vez, no parece decir mucho a favor de los italianos. Si empezamos por lo más superficial, es decir, sus comentarios supuestamente graciosos, la lista es interminable. Calculo que a estas alturas ha debido ofender a cerca de media humanidad con sus dudosos chistes, uno de los últimos referido a los desaparecidos de la dictadura argentina y los vuelos de la muerte.

 

Por supuesto, no son menos graves estas leyes hechas a medida para salir airosos de todos aquellos procesos judiciales en los que, de un modo u otro, se ha visto involucrado. Así, esta semana, el abogado británico David Mills fue condenado por un juez de Milán a cuatro años y medio de cárcel de corrupción en un acto judicial. Se ha considerado probado que ese letrado fue corrompido por la empresa Finnivest, de Berlusconi para que testificase en falso a favor del hoy primer ministro italiano. Éste se ha librado de ser juzgado en este mismo proceso gracias al laudo Alfano, una ley aprobada hace unos meses y que impide procesar a los cuatro altos cargos de la República italiana durante su mandato.

 

No obstante, sin duda uno de los hechos que más impresionan de estas últimas semanas es el caso de Eluana Englaro, ya saben, esta mujer que se quedó en coma irreversible como consecuencia de un accidente de tráfico hace 17 años, y que finalmente murió hace unos días, cuando por deseo suyo (expresado antes del fatal accidente) y el de sus padres se suspendió el tratamiento que la mantenía viva como un vegetal.

 

Para ello, sus padres han tenido que pasar por un verdadero calvario, debido a esa auténtica cruzada digna de la Edad Media que el Gobierno italiano, con el apoyo de la Iglesia católica, emprendió para que se mantuvieran con vida a Eluana. Para ello, el inefable primer ministro no dudó en pasar por alto la Constitución italiana, que garantiza al ciudadano el rechazo de cualquier tratamiento médico, incluso aunque ese rechazo pudiera acarrearle la muerte. También obvió la sentencia favorable a Eluana emitida por la Corte de Apelación de Milán el pasado mes de noviembre y que desencadenó esa furibunda reacción por parte de los más reaccionarios, quienes no han ahorrado ni insultos ni vejaciones.

 

Y parece que si bien para protegerse a sí mismo, Berlusconi no conoce límites, para respetar y garantizar los derechos de los demás padece serios problemas. Esta semana se ha suscitado una fuerte polémica en España debido a la circular de una comisaría madrileña, sobre “cupos” de detención de inmigrantes sin papeles. Pero en Italia la vida de los inmigrantes tampoco es muy envidiable.

 

Hace unas semanas, el Senado italiano ha aprobado una enmienda del partido de extrema derecha Liga Norte por la que se anula la norma por la cual los médicos no deben denunciar a los extranjeros que recurran a la red sanitaria pública. Con esa reforma, los médicos italianos podrán denunciar ante el juez a los inmigrantes ilegales a los que atiendan en los centros médicos. Por otra parte, la región del Lacio (cuya capital es Roma) tiene previsto aprobar un reglamento para los campos donde viven inmigrantes rumanos y otros nómadas, y que los convertirá en zonas aisladas y custodiadas por la policía municipal mediante puestos de control.

 

Pese a todo ese panorama, y pese a una complicada situación económica que está empobreciendo a muchos italianos, Berlusconi es una figura política con gran fuerza y popularidad como ha quedado demostrado en las últimas elecciones regionales que se han celebrado. Muchos atribuyen esa fortaleza a la desastrosa situación de la ¿oposición? política italiana.

 

El pasado día 17 de febrero, el líder del izquierdista Partido Demócrata (PD), Walter Veltroni, dimitió, harto de las luchas internas de su partido, y poco después de la última derrota electoral del PD, esta vez en las elecciones regionales de Cerdeña. De este modo, este partido, fundado en octubre 2007 y que buscaba ser una alternativa a Berlusconi, se hunde en medio de graves divisiones internas y sin un proyecto que aborde los graves problemas que tiene Italia.

 

Como señalaban recientemente dos intelectuales italianos, Andrea Camilleri y Paolo Flores D’Arcais, para derrotar a Berlusconi “bastaría un programa que articulase el tema del retorno a la legalidad, porque este retorno resolvería por sí solo gran parte de los problemas sociales, la explotación de la mano de obra negra y precaria, la evasión fiscal, los espantosos enriquecimientos ilícitos, un sistema financiero sin control…” ¿Existirá algún día esa alternativa que sirva de freno a los desmanes del actual primer ministro italiano?

10 comentarios en “¿Bella Italia?

  1. Gracias, Marta, por el artículo.

    Bella, sí; ma sporca.

    Los países pasan períodos de pujanza y otros de decadencia. «Â¿Cuándo se jodió la Argentina?» es la pregunta que continúan haciéndose por allá quienes creen vivir en un declive perpetuo desde, tal vez, 1928. ¿Cómo se paró Japón? ¿Alguien sabría indicar cuál es el origen último del fracaso colectivo italiano? ¿Puede aprenderse de todas estas experiencias para evitar que se produzcan en tu propio país?

    Abrazos para todos.

  2. Un desastre de país.
    Durante mucho tiempo, desde la distancia y el limitado conocimiento, muchos creíamos que había en realidad dos italias, al menos en el plano político. Nos cercioramos de que el desastre, sin embargo, es global y alcanza de lleno a todo ese país, con el espectáculo dado en los últimos años por la izquierda, en la que tantos -fuera de italia- tenían puestas sus esperanzas. Despues de décadas de crecer en la oposición, tras años de bloqueo, la izquierda -que había sido hegemonizada por el todopoderoso PCI-, cuando por fin tuvo su oportunidad…¡la cagó! El espectáculo de las variedades políticas de nombre botánico ha sido esperpéntico…Es decir, ¡¡auténticamente italiano!! Y eso por no hablar de aquella catarsis, también «a la italiana», del desmoronamiento del sistema corrupto montado en torno de la democracia cristiana y sus socios, con operaciones tipo «manos limpias» de por medio, con sus jueces mega-estrellas,…que han desembocado al cabo de pocos años, en la impunidad de ese primer ministro, hortera y millonario, sinverguenza notorio, impúdico dueño de canales públicos y privados, aliado en el poder con los antiguos fascistas. ¿Y el Vaticano? Bien, gracias, donde siempre..

    Yo creo que Silvio Berlusconi es perfectamente representativo de los italianos.

  3. Gracias por el artículo. Italia me da miedo, por ser un contraejemplo de cómo puede acabar un país desarrollado y con mucho potencial. Miedo de que España pueda acabar así, que en algún momento lleguemos a tener un Gobierno que sea un nido de corruptos y caciques, como ya pasa en algunas autonomías, como por ejemplo Canarias, donde el Vicepresidente del Gobierno y Presidente del PP, José Manuel Soria (el hermano gemelo alto de Aznar) está imputado en diversas causas de corrupción, junto con otros altos cargos del PP (sin que se momente tanto revuelo como el que estamos viendo en torno a Madrid o Valencia, cosas de la ultraperiferia).
    Y falta hablar de la última medida estrella de Berlusconi, criticada hasta por el Vaticano: autorizar patrullas ciudadanas. El fascismo vuelve, poco a poco.
    Si tienen tiempo y ganas, aquí encontrarán otro interesante artículo del historiador Perry Anderson sobre lo que está pasando en Italia (en inglés):
    http://www.lrb.co.uk/v31/n04/ande01_.html

  4. Hola Marta! Me quedo con tu primera frase «No cabe la menor duda de que Italia es un país hermoso y fascinante»…, el problema es el pero…jeje
    Saludosss

  5. Gracias Marta. Espero que tu vuelta sea por algún tiempo.
    Con decir que los italianos votan a Berlusconi como presidente de su gobierno, creo que ya está dicho todo sobre la situación actual de Italia.
    Pero de todos los horrores que se producen en ese país, uno que a mí me ha sobrecogido especialmente es el de la batalla librada por el padre de Eluana Englaro para conseguir que su hija pudiera morir. Es curioso que nadie hayamos escrito nada en DC sobre el caso. Yo pensé un día colgar una entrevista al señor Englaro en El País domingo, pero al final no lo hice. Me impresionó la entereza y la firmeza de ese hombre. Cómo fue capaz, a pesar de la tragedia en la que vivió durante tantos años, de defender la voluntad de su hija y los principios de su familia frente a la oposición de la Iglesia y de Berlusconi, tratando de impedírselo por todos los medios, legales o ilegales. Ver a Berlusconi, sinvergüenza sin principios, aliado con la iglesa católica para «salvar una vida», es de las cosas más obscenas que yo he visto en mucho tiempo. Todos mis respetos al señor Anglano, capaz de vencer a toda esa panda de canallas.

  6. Muchas gracias, Marta. Es duro publicar en fin de semana, eh? Parece que nadie se conecta.

    La imagen actual de Italia está por los suelos, pero creo que el país está lleno de gente sensata y hasta heroica, como el padre de Eluana. Y no nos olvidemos de la imagen de España en el segundo gobierno de Aznar: en América Latina, que es lo que mejor conozco, la gente, incluso de derechas, estaban horrorizados de ver a España convertida en el ama de llaves de Bush, e intentando convencer a los mexicanos, por ejemplo, de que apoyaran la resolución sobre Irak. Y como Aznar había tenido mayoría absoluta, preguntaban si nos habíamos vuelto definitivamente locos.

    Italia está mal, porque no han logrado ofrecer una alternativa nueva al berlusconismo, porque la izquierda no ha sabido cambiar de caras, y en cambio ha intentado amansar su discurso. Es curioso que mientras una película se titulaba ¡Viva Zapatero! para expresar lo que muchos italianos envidiaban el cambio político de 2004, los políticos de centro-izquierda hacían serios esfuerzos para que no les acusaran de ‘zapaterismo’.

  7. Pepemart (3), te tengo dicho que no leas a Perry Anderson, que ya eres muy mayor y debes sentar cabeza. ¿Qué van a decir tus jefes si se enteran?

  8. Muy buen artículo Marta. La Italia del renacimiento dió al mundo una explosión de pintores, literatos, escultores y músicos sin parangón en comparación con otros paises europeos. Sin embargo, políticamente era un desastre. Mientras que Inglaterra, Francia, Austria, Holanda, Portugal y España estaban consolidando un Estado Central, Italia seguía dividida en multiples estados con frecuentes guerras donde los Cabalieri se ganaban la vida sirviendo a una u otra Ciudad Estado. Francia y España se enfrentaban utilizando como campo de batalla a Italia. En siglos posteriores, Italia aporta a la cultura la Opera. Alemania y Austria siguieron su ejemplo. Llegamos al siglo XIX y XX y surgen inventores como Marconi o Volta. Grandes empresarios como la familia de la empresa Fiat(¿Agnelli?), todo ello en medio de un proceso de unificación que triunfó. Despues de la II guerra mundial Italia sorprende al mundo con sus magníficos cineastas cuyo neorealismo italiano con su peculiar sentido del humor basado en como se salva uno de la pobreza con ingenio, inspiró tanto a nuestros Berlanga y Bardem. Entre todos el espectacular Visconti con su sentido de la belleza en pie de igualdad con el renacimiento italiano. Políticamente, sin embargo, en Italia se manifiesta la guerra fria con la lucha continua entre la democracia cristiana y el partido comunista. A la decadencia del comunismo que el eurocomunismo -inventado por ellos- no pudo salvar, siguió el socialismo de Betino Craci. Este que se apoyaba en la lucha contra la corrupción, demostró ser igual o mas corrupto que la democracia cristiana, por lo que creó una imagen al pueblo italiano de que la política es toda una mierda. Desde entonces la izquierda se atomiza y en la derecha surgen los neofascismos y nacionalistas paduanos dirigidos por el televisivo Berlusconi. Los entendidos dicen que si bien Italia es un desastre políticamente, el empresariado italiano y sus diseñadores siempre consiguen crear empresas rentables internacionalmente. Personalmente creo que la decadencia italiana sigue su curso. Si encima acaban echando la culpa de sus males a la ola de inmigración, pues peor.

  9. En Italia hay buena pasta y un gobierno al que los italianos han elegido como mal menor. Como decía Indro Montanelli ….. hay que votarles aunque haya que taparse la nariz.

Deja una respuesta